Apoyo & Asociados (A&A) ratificó las clasificaciones del Primer Programa de Instrumentos de Corto Plazo en CP-1-(pe) y las obligaciones de largo en AA-(pe), de Petroperú, con perspectiva negativa.
Así lo indica un informe emitido por esa calificadora -asociada a Fitch Ratings- elaborado en base a los estados financieros auditados a la petrolera estatal, a diciembre del 2022, y que dio a conocer esta última a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV).
Los instrumentos en mención se refieren, en el caso de los de corto plazo, a las deudas pagaderas a un año para la para compra de combustibles, pago a proveedores de servicios, pago de intereses de las tres series de bonos emitidos por la empresa, por US$3,000 millones, según explicó el expresidente de Petroperú, César Gutiérrez.
Agregó que en las de largo plazo, comprenden al pago de bonos que vencen el 2032 y 2047, y los pagos futuros que hay que hacer a partir del próximo año de las amortizaciones que se le hace a Cesce (que garantizó préstamos a la empresa). En total, anotó, los instrumentos de deuda de corto como largo plazo suman US$5,500 millones.
LEA TAMBIEN: Podría subir precio de combustibles, pese a entrada en operación de refinería Talara.
¿En qué se fundamenta la perspectiva?
Se mantiene la perspectiva negativa, según el informe de A&A, se fundamenta en la generación negativa de caja y altos niveles de endeudamiento. La entidad explicó que, al cierre del 2022, la empresa registró un EBITDA negativo por US$103.8 millones.
Esto último fue debido entre otros, a la incapacidad de la compañía de trasladar al precio todo el incremento de sus costos, la disminución del volumen de ventas por problemas en el abastecimiento y los sobrecostos asumidos para las pruebas de la nueva refinería.
Dicho comportamiento continuó durante el primer trimestre del 2023, donde su EBITDA fue menor en US$103.5 millones (versus US$75.1 millones al cierre del primer trimestre del 2022).
Escalada en el endeudamiento
Respecto al nivel de endeudamiento, al cierre del 2022, el saldo de deuda financiera se incrementó a US$5,853 millones, producto de mayores requerimientos de financiamiento para capital de trabajo, como consecuencia del incremento de los precios internacionales del petróleo y sus derivados.
Además, las demoras en la puesta en operación plena de la Nueva Refinería Talara (NRT) obligaron a que el portafolio de productos importados se componga principalmente de productos refinados, cuyo valor es superior al del crudo, detalló la calificadora.
LEA TAMBIÉN: Confiep: Adjudicar lotes a Petroperú sin concurso ahuyentará inversión privada.
Así, al cierre de marzo de 2023, la deuda financiera -anotó el informe de A&A continuó incrementándose y llego a un monto de US$6,025 millones.
La clasificadora espera que, cuando la nueva refinería llegue a su operación óptima, los márgenes de refino de la empresa mejoren significativamente como consecuencia de la mayor flexibilidad de la estructura de costos y los mayores ingresos, dada la mayor carga y producción de derivados de mayor realización económica.
¿Qué podría modificar las clasificaciones asignadas?
Según el informe, las clasificaciones a Petroperú podrían mejorar de darse una reducción importante en el nivel de apalancamiento, ya sea a través de mayor participación de recursos propios, o aportes de capital en la estructura de financiamiento de la nueva refinería.
Pero, podrían las clasificaciones podrían ser negativas, si la empresa no revierta el deterioro de su capacidad de generación de caja luego de la puesta en marcha de la NRT.
LEA TAMBIÉN: Petroperú: lo que dice el MEF sobre capitalizar a la empresa estatal.
También irían a la baja, ante el incumplimiento de la reestructuración de la organización que le permita fortalecer su gobernanza y la sostenibilidad financiera y operativa.
Asimismo, si hay un debilitamiento del respaldo que tiene Petroperú por parte del Estado, lo cual podría reflejarse incluso en una disminución en la clasificación del riesgo soberano del país.