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En enero último, según la Cámara de Comercio de Lima (CCL), el consumo interno de cemento acumuló seis meses continuos de crecimiento debido a la reanudación de las obras privadas y públicas, así como a la autoconstrucción que se mantuvo al alza en plena pandemia.
Y, considerando que este indicador tiene un peso ponderado de 74% en el PBI del sector Construcción, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), las perspectivas de crecimiento para esta actividad económica se mantienen –con 19.4%– entre las más altas para el 2021.
Frente a ese panorama, en la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) refieren que, a pesar de que el año pasado la pandemia afectó el consumo y la producción de cemento, para los próximos dos años –con los dos dígitos de expansión de la actividad constructora– se espera un crecimiento mayor en las ventas locales de cemento.
Para enfrentar el desafío que supone afrontar mayores colocaciones de este producto, en el último Informe Económico de la Construcción (IEC), Guido Valdivia, director ejecutivo del gremio constructor, afirma que la industria cementera deberá estar un paso adelante en innovación si pretende mantener la posición de liderazgo que ocupa dentro del sector.
¿La razón? Explica que la introducción de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, el internet de las cosas y la impresión digital en tres dimensiones en la actividad constructora favorecerán el empleo de nuevos materiales y sistemas productivos, por lo que la industria del cemento debe responder ante ello.
El IEC también alerta que la industria cementera deberá hacer frente a los crecientes requerimientos de una actividad productiva a la que se le atribuye un impacto significativo en el medioambiente.
El mercado
Como una clara muestra de la recuperación que ha tenido el mercado cementero local, en Cementos Pacasmayo resaltan que a pesar de lo complicado que fue el año para el sector Construcción, lograron cerrar el cuarto trimestre del 2020 con cifras muy alentadoras.
Y, durante los últimos 12 meses, la empresa cementera incrementó su participación en el mercado nacional en 3.4 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo del 2019, alcanzando un 25.6%, uno de los niveles más altos de su historia.
Aseguran que estos resultados encuentran explicación, principalmente, en el incremento continuo de las ventas de cemento en bolsa dirigido al segmento de la autoconstrucción, así como a la venta de cemento para el sector público vinculado a los proyectos de la reconstrucción.
Similar han sido los comportamientos de Cementos Lima y Cemento Andino (integradas en Unacem) y también de Yura, pero en Capeco también destacan el comportamiento de las otras marcas que forman parte del mercado peruano (Caliza Cemento Inca S.A., Cemex y Cementos Wari) que han tenido un ritmo de crecimiento bastante dinámico y aportan positivamente a los resultados del mercado cementero, cuyo consumo en enero último habría subido –según Capeco– 19.9%.
