Cine peruano: ¿han incrementado las producciones nacionales en los últimos años?

La ley del cine y el audiovisual se ha convertido en la promesa que busca generar una mayor dinámica en la industria del séptimo arte a nivel local. El pasado 6 de diciembre el Ejecutivo emitió un Decreto de Urgencia con cargo a dar cuenta a la Comisión Permanente. Esto a fin de que lo examine eleve al Pleno, una vez que se instale.

Entre los principales puntos, destaca el otorgamiento de más recursos para apoyar proyectos audiovisuales diversos, entre ellos, series de televisión, contenidos para medios digitales, festivales, acciones de formación, etc. Esto es con un mínimo de S/25 millones (6,000 UIT) como presupuesto anual a otorgarse en estímulos concursables y automáticos a nivel nacional.

Además se dispone una asignación de entre 30% y 40% como mínimo anual para la creación audiovisual desde las regiones. Asimismo, se busca promover acciones para apoyar y destacar al cine indígena y en lenguas originarias.

Producción local

Sin embargo, al margen de esto, ¿cómo se ha comportado la industria nacional en años recientes? Si bien el promedio anual de seis filmes nacionales ha quedado en el pasado para después multiplicarse, a partir del 2015 (el mejor año de la historia del cine local, con 31 estrenos comerciales), nuestras producciones en cartelera se han reducido de manera relativa.

Esto, sin embargo, no supondría un escenario desalentador.

Tan solo en 2018 se colocaron en el circuito comercial alrededor de 23 películas peruanas, dos menos que las del año previo. En ese periodo destacó, además, la presencia de dos filmes independientes hechos fuera de Lima: “Wiñaypacha” (Puno) y “La Casa Rosada” (Ayacucho).

Ambos consiguieron no solo mantenerse varias semanas en cartelera, sino también ubicarse entre las más vistas del primer semestre de ese año.

Documentales

Este 2019 el panorama no sería desigual. La evolución del cine local se ha observado así a través de su presencia en festivales internacionales, así como su coincidencia en cartelera.

Por ejemplo, en un mercado cuyas producciones suelen salir de manera espaciada, el pasado 10 de octubre se estrenaron en paralelo tres cintas locales: Aj, zombies; Píxeles en familia y La Revolución y la tierra.

De hecho, éste último fue el documental más visto en la historia cinematográfica peruana.

Por su parte, Canción Sin Nombre, una producción local dirigida por Melina León, ha venido ganando reconocimiento en distintos festivales del mundo e incluso tuvo una presentación en Cannes.