Activar Spotify mediante comandos de voz no es ninguna novedad. De hecho, se puede hacer desde un gran número de dispositivos gracias a la integración de la app de streaming de música con los asistentes de Google, Amazon o Apple.
Pero, ¿y si Spotify contará con su propio asistente de voz que no necesitara vincular la cuenta con servicios de terceros? Según el portal Computer Hoy, eso es lo que se esconde tras la función “Hey Spotify”.
Tal y como ha desvelado desde su cuenta en Twitter la investigadora de código Jane Manchun Wong, Spotify podría estar preparando la integración de un miniasistente de voz con el que podría realizar acciones como iniciar la app en un smartphone o reproducir tu música favorita.
La nueva función necesitaría activar los permisos de la app para usar el micrófono, por lo que solo funcionará una vez la aplicación ya está abierta, aunque sea en segundo plano.
Esto podría verse como una desventaja ya que, si un usuario ya ha iniciado la aplicación en su smartphone es porque, probablemente, ya se está reproduciendo música. Sin embargo, Spotify puede que no haya integrado esta función pensando en el smartphone como plataforma final, sino en los centros de entretenimiento a bordo de los coches.
Al activar esta función, podrías controlar por voz la aplicación que se está ejecutando en el vehículo sin apartar las manos del volante. Algo similar a lo que ya permiten las plataformas de Android Auto y Apple Car, pero sin depender de las APIs de terceros.
Con esta función, Spotify incluso podría estar dando algunas pistas sobre el estado de un proyecto que lleva ya algún tiempo en sus cajones: un dispositivo conocido como “Car Thing” que se integraría el coche para disfrutar de la música de Spotify directamente en los altavoces del coche, sin necesitar ninguna plataforma de entretenimiento adicional.
Tendría todo el sentido integrar un sistema de control por voz independiente en un dispositivo que no necesita estar conectado a ninguna plataforma, de forma que se mantendría el mismo nivel de seguridad al volante, pero sin que la compañía dependa de terceros para implementar su producto.