Después de haber colapsado los hospitales de las amazónicas Loreto y Ucayali, la pandemia del COVID-19 se extiende ahora por la selva central de Perú, en donde el oxígeno se ha convertido, como ya pasó en otras regiones del país, en un material escaso e imprescindible para combatir la enfermedad.
Las regiones de la selva peruana son el foco del coronavirus desde mayo pasado, con más de 9,600 casos en Loreto y 8,400 en Ucayali, y a partir de junio la pandemia ha avanzado hacia San Martín con más de 6,300 contagios y 4,800 enfermos en Junín, donde el oxígeno es un bien muy escaso.
La Defensoría del Pueblo reportó en junio que doce regiones del país, de un total de 25, se habían quedado prácticamente sin suministro de oxígeno para atender los casos graves del COVID-19, entre ellas Loreto, Amazonas y Madre de Dios, a las que se han unido San Martín, Junín y Ucayali, todas zonas selváticas y de difícil comunicación con el exterior.
El principal problema en esas localidades es el escaso número de centros de salud, con equipamiento obsoleto y déficit de personal, como ejemplifica la provincia de Chanchamayo, en Junín, en donde los pobladores han pedido a los párrocos de la zona que organicen una colecta para dar oxígeno a sus enfermos, replicando así las prácticas exitosas que ya se llevaron a cabo en otros lugares del país.
Hospitales sin ventiladores
Los casos en Chanchamayo se atienden en el hospital regional de La Merced, que sólo cuenta con siete camas con ventilador mecánico, y en el hospital del seguro social, que cedió estos equipos a un establecimiento de la ciudad de Huancayo, la capital regional, cuando la epidemia atacó en sus primeras semanas, según explicó el vicario general del distrito de San Ramón, Alfonso Tapia.
“En el hospital de La Merced hay siete camas UCI, pero las siete ya están ocupadas. El hospital está lleno, no cabe más gente, tiene la mitad del personal que requiere para poder trabajar porque la gente no quiere trabajar por miedo al contagio”, dijo Tapia en entrevista telefónica desde San Ramón.
El religioso contó que "en Chanchamayo recién está empezando esto porque nos han informado que el pico más alto va a ser en agosto".
De acuerdo a los datos de la dirección regional de salud de Junín, la provincia de Chanchamayo tiene 988 contagios, detrás de Huancayo con más de 3,000, y el número de fallecidos es de 188 en toda la región, incluido el deceso del alcalde del distrito de Paca, Owen Poves, reportado este jueves.
"El problema es que el hospital tiene presupuesto para comprar oxígeno como para un año normal y ahora están utilizando siete veces más oxígeno que el normal", añadió el vicario.
Buscan recolectar US$ 125,000
Por ese motivo, "la misma gente han venido a tocar las puertas no sólo de la parroquia donde yo estoy, en San Ramón, sino de las parroquias vecinas de los otros distritos. La gente misma es la que nos ha empujado a echarnos al agua", afirmó.
Tapia contó que la población ha buscado a los párrocos como “garantía” para lograr recolectar US$ 125,000 que les permita adquirir una planta de oxígeno para abastecer el hospital regional, tal como hizo un sacerdote en la ciudad de Iquitos.
"Hemos empezado desde esta semana, la gente va apoyando poco a poco, a nivel de personas particulares, y el sábado ya tenemos una radiotón, ya que no se puede hacer mucho más porque estamos en cuarentena", indicó el vicario sobre las medidas de emergencia que siguen vigentes en esta región.
"Nos estamos abocando a lo más urgente, que es que esas personas no se mueran por falta de oxígeno, porque ya son varios conocidos nuestros que se han muerto simplemente por falta de oxígeno", expresó.
Actualmente, el oxígeno medicinal en Junín es abastecido por una planta ubicada en la ciudad minera de La Oroya, pero ésta tiene una sobredemanda de otras regiones del centro del país como Ayacucho, Huancavelica y Huánuco, que hacen que un camión tenga que esperar ocho horas en cola para llenar sus tanques de oxígeno.
"Vamos a ver el sábado cómo nos va, queremos darle un empujoncito y luego seguir continuando porque la proyección de trabajo es hasta fin de año o hasta que se consiga la planta", dijo el sacerdote.
Huánuco quintuplicó demanda
En forma similar a la situación en Junín, en la vecina Huánuco, el gerente regional de salud, Fernando Ramos, informó que su demanda de oxígeno se quintuplicó y que tuvo dificultades para recibir el suministro de 300 balones diarios de la planta de La Oroya.
A pesar de recibir 200 balones del ministerio de Salud, Ramos agregó que siguen con el problema pues "se necesitarán de otros 200 balones con urgencia para evitar problemas de abastecimiento y atención de pacientes" en dos hospitales de la región.
Sin embargo, el ministro de Salud, Víctor Zamora, aseguró que el Estado está "muy cerca de cubrir toda la demanda de oxígeno" requerida por los pacientes en el país.
“Acabamos de cerrar una negociación, gracias a la cual ingresará al mercado 101 toneladas más, cubriendo el 90% de la demanda de oxígeno del país”, indicó Zamora.
El titular añadió que con esa medida "estamos cerrando la brecha de oferta de este insumo medicinal y no esperaremos mucho (para llegar al 100%), ya que tenemos instalada toda la red de distribución".
Zamora dijo que el consumo habitual de oxígeno medicinal en Perú era de 60 toneladas diarias, pero que con la pandemia la demanda creció a 290 toneladas al día.