La Contraloría General de la República detectó y alertó una serie de deficiencias en el servicio de conservación del corredor vial Ilo – Tacna – Tripartito y Ovalo Tripartito – Collpa, que recorre las regiones de Moquegua y Tacna, y fue adjudicado por el Proyecto Especial de Infraestructura de Transporte Nacional (Provías Nacional) con una inversión ascendente a S/ 65 millones 744,448.
Cabe precisar que Provías Nacional adjudicó al consorcio formado por la empresa China Civil Engineering Construction Corporation Sucursal del Perú e INIP Ingeniería Integración de Proyectos SAC, ambas cuestionadas e investigadas porque habrían sido favorecidas con licitaciones públicas.
El pasado 23 de agosto de 2021, Provias Nacional suscribió el Contrato de Servicios N° 083-2021-MTC/20.2 con la finalidad de ejecutar el “Servicio de Gestión y Conservación por Niveles de Servicio del Corredor Vial: Ilo – Tacna – Tripartito y Ovalo Tripartito – Collpa”.
El corredor vial materia de intervención está conformado por ocho tramos, con una longitud de 346,710 kilómetros y el servicio contratado incluía la conservación rutinaria, la conservación periódica, las atenciones especiales, el relevamiento de información, entre otros.
Desgaste y deterioro en cuatro tramos
Según el Informe de Visita de Control N° 011-2022-OCI/0661-SVC, cuyo periodo de evaluación va del 28 de abril al 11 de mayo de 2022 y fue emitido el 17 de mayo del presente año, la visita de auditores de la Contraloría permitió verificar in situ el estado de la superficie del pavimento, observando la presencia de diversos tipos de desgaste y deterioros en parte de los tramos I (provincia de Ilo), II (Tacna - Ilo), III (Ovalo Tarapacá – Dv. Calana, ambos en Tacna) y IV (Dv. Calana – Prog. 43+600).
Según los términos de referencia del servicio para los tramos mencionados, el contratista tenía que realizar la conservación rutinaria, la cual se ejecuta para prevenir el deterioro de las vías, sin embargo los daños advertidos podrían requerir, además de labores de prevención, de la realización de actividades para recuperar la resistencia de los materiales para resistir las cargas vehiculares, lo cual no fue contemplado en el Plan de Conservación Vial.
Además se pudo comprobar que en los tramos I, II, III y IV no se han realizado evaluaciones de los deterioros existentes en la superficie y su posible relación con el déficit de capacidad estructural para resistir cargas vehiculares.
De otro lado, en el tramo III se ha contemplado realizar trabajos de “Sello Asfáltico en Calzada” para proteger, de manera oportuna, al pavimento de pequeñas fisuras y resquebrajamientos, sin embargo el Plan de Conservación – Evaluación de Daños (elaborado por el contratista y actualmente en proceso de revisión por la entidad) menciona que en dicho tramo se presentan deterioros que están relacionados con fallas de pavimento de tipo estructural, es decir por el desgaste de los materiales que componen el pavimento y la disminución de la capacidad de resistir cargas vehiculares.
Esta situación ocasiona el riesgo de realizar actividades de conservación rutinaria que no reúnen las condiciones de calidad ni de eficacia en el uso de recursos públicos debido a que no está definida la condición de la estructura de los pavimentos en los tramos I, II, III y IV, y por ende no se define tampoco la vida útil que tienen dichos pavimentos para resistir cargas vehiculares a futuro.
Riesgo de gastos injustificados
Los auditores de la Contraloría también han verificado los trabajos de sello de fisuras aparecidas en algunos sectores del tramo VIII, cuya construcción se dio en el 2018 y tiene un período de garantía de siete años, según el contrato de la obra, que vence en el 2025.
En ese sentido, la comisión de control señala que corresponde identificar las posibles causas de las fallas tipo fisuras que se vienen atendiendo con trabajos de sello, y de ser el caso, iniciar el procedimiento de requerimiento de información al contratista ejecutor de la carretera. Esta situación genera el riesgo de que Provías Nacional asuma injustificadamente gastos por dicho sello de fisura, en caso se verifique que dichas fisuras se deben a la deficiente ejecución de la obra de asfaltado.
Distorsión en servicio de conservación
Asimismo, el informe de visita de control señala que en el tramo VI, que se encuentra a nivel de afirmado (obra inconclusa ejecutada en el año 2018) y con buena transitabilidad, corresponde realizar trabajos de conservación rutinaria en el primer año del servicio, y en el segundo año se tiene programado ejecutar una obra de rehabilitación, según los términos de referencia del servicio de conservación.
Sin embargo, se advierte que el clima, sobre todo en periodo de lluvia, y las cargas de tráfico vehicular son factores de desgaste de la plataforma que podrían comprometer su estabilidad y requerirse trabajos mayores a los de una conservación rutinaria.
Cruce de obras
El cuarto riesgo detectado en el informe se presenta en el tramo II, que corresponde a una vía asfaltada de dos carriles y bermas en ambos sentidos, donde se ha previsto realizar actividades de conservación rutinaria por tres años (2022 - 2025); sin embargo, en ese mismo tramo Provias Nacional ha programado ejecutar la obra “Mejoramiento de la Carretera Boca del Rio – Tacna en los distritos de Tacna, Sama y La Yarada Los Palos”. Considerando que a partir del año 2023 se ejecutaría la obra de mejoramiento, entonces no sería factible realizar las actividades de conservación en el segundo y tercer año del servicio de conservación contratado por Provías Nacional al consorcio chino-peruano.
Recomendaciones
Ante estos hechos, la comisión de control recomendó hacer de conocimiento al Director Ejecutivo de Provias Nacional los resultados del informe de visita de control, con la finalidad que se adopten las acciones correctivas que correspondan para asegurar la continuidad del proceso y adecuada ejecución del servicio de gestión y conservación del Corredor Vial Ilo-Tacna-Tripartido y Óvalo Tripartito – Collpa.