Jefe de Proyectos en VALTX
Cuando las empresas tienen como objetivo fundamental brindar una experiencia excepcional a sus clientes, y requieren innovación permanentemente en sus productos y servicios, optimizar sus modelos de negocio; definitivamente es momento de mirar con un foco estratégico su proceso de Transformación Digital (TD), aplicando metodologías ágiles mediante una propuesta de valor integral, económica, simple y transparente con el apoyo de la tecnología.
Producto de la implementación de TD, las empresas tendrán procesos estructurados, eficientes y digitalizados, con reglas de negocio claras que permitirán tomar decisiones automatizadas. Habrán logrado instalar en la empresa estrategias para potenciar la creatividad e innovación entre los colaboradores; se creará un ecosistema que facilitará la evolución y la gestión del proceso de cambio utilizando metodologías ágiles de gestión.
Los integrantes de una organización que ha evolucionado en TD, han aprendido a trabajar de manera colaborativa tanto al interior de la empresa como con clientes y proveedores externos, logrando formar un ecosistema colaborativo, donde los empleados aportan competencias, conocimientos y experiencias, con una cultura innovadora y ágil como su forma natural de trabajar para generar mejores propuestas de valor a los clientes.
La pandemia impulsó la transformación digital en las empresas, las cuales se vieron en la necesidad de acelerar el cambio y evolucionar a una realidad digital para ser más competitivas, por eso podemos decir que todas las empresas están en la capacidad de innovar e iniciar su proceso de TD.
Sin embargo, no existe un único camino para iniciar la TD en una empresa, el roadmap no es estándar y dependerá del grado de madurez de la empresa. Para ello, es primordial conocer las brechas que la organización presenta en las dimensiones de estrategia, cultura, liderazgo, procesos y tecnología.
Un error frecuente en su aplicación es cuando se trata solo de la implementación de tecnologías y sistemas, y no se toma el tiempo para hacer una revisión detallada de los procesos de negocio, por lo que muchas veces se llegan a automatizar procesos ineficientes y/o mal diseñados, haciendo de esta manera a la empresa menos competitiva.
La TD está orientada a todo tipo de empresas que buscan mejorar su enfoque y afinar su estrategia de negocio, optimizar sus procesos y mejorar la experiencia de los clientes, en definitiva, cambiar su propuesta de valor. El éxito se encuentra en la capacidad de respuesta de las empresas al cambio que experimenta la sociedad. Algunos ejemplos de sectores que aplicaron con éxito la TD son: telecomunicaciones, banca, industria, comercio, seguros, entre otros.