El Gobierno de Venezuela y los partidos de oposición están listos para reiniciar las negociaciones políticas después de las elecciones intermedias en Estados Unidos la próxima semana, una medida que podría llevar a Estados Unidos a comenzar a aliviar algunas sanciones a la industria petrolera del país, según personas familiarizadas con el proceso.
Las delegaciones del Gobierno y los principales partidos de oposición podrían reunirse en Ciudad de México tan pronto como a finales de la próxima semana, según varias personas con conocimiento directo de las negociaciones. Las amplias conversaciones tendrían como objetivo llegar a acuerdos sobre las condiciones para las elecciones de Venezuela de 2024, así como establecer un programa de ayuda humanitaria y discutir las sanciones de Estados Unidos
Reanudar las negociaciones, que fracasaron hace un año, abre la puerta para que Estados Unidos considere levantar algunas restricciones al país, la mayoría de las cuales fueron implementadas por la Administración Trump. Washington ha sugerido la idea del alivio de las sanciones como una forma de hacer que el presidente Nicolás Maduro reinicie las conversaciones con los opositores políticos.
Durante mucho tiempo corrió el rumor de que las conversaciones se reanudarían y las elecciones intermedias se consideran clave para que finalmente avancen, ya que comprometerse con el régimen de Maduro antes de la votación podría tener consecuencias políticas.
”Es un tema muy delicado entre ciertos segmentos del electorado de Estados Unidos el que se perciba que la Administración Biden está haciendo algo que ayuda a Maduro o, más ampliamente, algo que ‘atienda’ a un régimen autoritario”, dijo Risa Grais-Targow, analista de Eurasia Group que sigue a Venezuela.
En un correo electrónico, un portavoz dijo que el Departamento de Estado de Estados Unidos no es parte de las conversaciones y no tenía nada que informar, dado que la reanudación de las negociaciones no se ha anunciado públicamente.
”Las negociaciones lideradas por Venezuela son el único camino hacia elecciones creíbles, libres y justas que reflejen la voluntad del pueblo venezolano en sus esfuerzos por revitalizar la democracia, el estado de derecho y el respeto por los derechos humanos”, dijo el vocero.
Ni el Gobierno venezolano ni los voceros de la oposición respondieron a los mensajes en busca de comentarios. Noruega moderaría las reuniones, mientras que Rusia y Holanda actuarían como garantes en el proceso, según las personas.
Sanciones petroleras
Después de las elecciones del martes, el presidente Joe Biden podría tener más flexibilidad en su política exterior, dijo James Bosworth, fundador de Hxagon, una consultora de riesgo político.
”El resultado podría ser algo contrario a la intuición. Los presidentes que enfrentan una mayor oposición en el Congreso a menudo recurren a movimientos de política exterior más audaces”, dijo. “Podrían levantarse ciertas sanciones petroleras en los próximos meses. El levantamiento de las sanciones sobre la deuda es posible si hay un mayor progreso”.
Como primer paso, Estados Unidos está dispuesto a otorgar una licencia limitada a Chevron Corp. que relajaría las restricciones financieras y le permitiría recibir el pago por el petróleo que bombea en operaciones conjuntas con PDVSA, la empresa energética del Gobierno, según las personas. La empresa con sede en California se ha visto limitada por sanciones que le impiden realizar nuevas inversiones en el país.
La producción de la compañía en Venezuela se ha reducido en más de la mitad este año a alrededor de 60.000 barriles por día, según cifras de producción a las que tuvo acceso Bloomberg. Incluso en un escenario en el que Estados Unidos levante todas las restricciones, Chevron todavía necesitaría años para reacondicionar campos y equipos.
Un vocero de la compañía no hizo comentarios inmediatos sobre el impacto de las negociaciones de México.
Reducir las sanciones le daría un impulso a Maduro, cuyo Gobierno necesita efectivo al tiempo que trata de mantener a flote un repunte económico que ha traído cierta estabilidad después de años de crisis.
Las conversaciones tendrían como objetivo fijar una fecha para las elecciones presidenciales en el 2024 y establecer un fondo para fines humanitarios, como la reconstrucción de hospitales y la red eléctrica, posiblemente con la supervisión de las Naciones Unidas. Según el plan, se podrían desbloquear hasta US$3.000 millones en fondos actualmente congelados en el extranjero, dijeron las personas.
El Gobierno suspendió las negociaciones en octubre del 2021 luego de que el aliado de Maduro, el empresario colombiano Alex Saab, fuera extraditado a Estados Unidos desde Cabo Verde para enfrentar cargos por lavado de dinero. A través de sus abogados, Saab ha negado las acusaciones.
Funcionarios estadounidenses viajaron a Caracas en marzo y junio para sostener reuniones con Maduro con la intención de atraerlo de nuevo a las negociaciones. Después de la primera visita, Caracas liberó a dos presos políticos. Semanas después, Washington alivió algunas sanciones y un familiar de Maduro, Carlos Malpica Flores, salió de la lista de personas sancionadas.
Más recientemente, ambos países llevaron a cabo un intercambio de prisioneros en el que varios ejecutivos petroleros y un exmarine estadounidense fueron liberados por Venezuela mientras que dos familiares de Maduro fueron liberados por Estados Unidos.