Los suizos votaron este domingo a favor de limitar casi la totalidad de la publicidad para el tabaco, según los primeros resultados de una consulta que muestran que el 54% de los electores aprobó esta iniciativa.
La Cancillería federal da ganador al “Sí” con un 54%, así como también en la mayoría de los cantones, siendo ambos resultados necesarios para poder aprobar la iniciativa popular. Las cifras finales son esperados hacia el anochecer.
“Estamos extremadamente contentos”, dijo a la AFP Stefanie De Borba de la Liga Suiza contra el Cáncer ante la publicación de estos primeros resultados. “La gente entendió que la salud es más importante que los intereses económicos”, añadió.
Este país alpino, donde aproximadamente una de cada cuatro personas es fumadora, contaba hasta ahora con una legislación muy permisiva en lo que concierne al ámbito de la publicidad del tabaco, sobre todo gracias al fuerte lobby que hacen las mayores tabacaleras del mundo, que tienen allí sus sedes.
A escala nacional, hasta ahora solo se prohibían los anuncios en radio y televisión y específicos dirigidos a menores de edad.
Y, pese a que algunos cantones ya habían endurecido sus normas y una nueva ley al respecto entrará en vigor en 2023, los grupos antitabaco pedían medidas más decisivas para proteger a niños y jóvenes, por lo que lanzaron esta iniciativa popular.
¿Infantilizar a los adultos?
Así, se prevé la prohibición total de publicidad de tabaco en sitios a los que tengan acceso niños y adolescentes, o sea, en la prensa, en carteles, Internet, cine y durante manifestaciones. Estas mismas reglas conciernen al cigarrillo electrónico.
“Esto quiere decir que prácticamente toda la publicidad quedó prohibida, inclusive para adultos. En nombre de la protección a la niñez, se infantiliza a los adultos”, se quejó Patrick Eperon, portavoz de la campaña por el “No” y miembro de la organización Centro patronal.
El mismo argumento de Philip Morris International (PMI), gigante mundial del sector, que al igual que British American Tobacco y Japan Tobacco tiene su sede central en Suiza.
El país paga un alto precio por el tabaquismo, con 9,500 muertes anuales vinculadas sobre una población de 8.6 millones de habitantes. A ello, se suman unas 400,000 personas con enfermedades crónicas vinculadas al tabaquismo, de acuerdo al doctor Jean-Paul Humair, portavoz del “Sí”.
Causa animal rechazada otra vez
También de acuerdo a los primeros resultados, por otra parte, los helvéticos se negaron a prohibir las pruebas de laboratorio con animales y humanos, con casi un 80% de las voluntades.
Además, los inscritos en el cantón de Basilea-ciudad, muy reputado por su zoológico, así como por sus grupos farmacéuticos, con un 75% rechazarían una propuesta destinada a brindar derechos fundamentales a los primates no humanos.
Ya fueron rechazadas tres iniciativas similares, en 1985 (70%), 1992 (56%) y 1993 (72%).
Ningún partido la apoyó puesto que, de acuerdo al gobierno, de aprobarse habría tenido graves consecuencias económicas y sanitarias, en la confederación cuyos sector químico-farmacéutico representa más de la mitad de sus exportaciones.
No obstante, afirman que la legislación helvética está entre las más estrictas del mundo en lo concerniente a experimentación con animales.
A nivel federal, de acuerdo a los primeros resultados, la población suiza rechazaría por más del 56% una ley que prevé un apoyo adicional a los medios de comunicación, como consecuencia de la caída de sus ingresos por publicidad.