La longitud de su red ferroviaria de alta velocidad se cuadruplicó, pasando de 9,300 a 40,000 km entre el 2012 y el 2021. (Foto: Justin Chin | Bloomberg)
La longitud de su red ferroviaria de alta velocidad se cuadruplicó, pasando de 9,300 a 40,000 km entre el 2012 y el 2021. (Foto: Justin Chin | Bloomberg)

absoluta eliminada, subida de ingresos, un ambicioso programa espacial y toma de conciencia sobre : la de puede jactarse de importantes progresos en diez años, aunque con algunos matices.

Extrema pobreza erradicada

En un país que durante mucho tiempo vivió en la miseria, este es un marcador crucial para la legitimidad del Partido Comunista.

De los 770 millones de chinos en pobreza extrema en 1978, el país pasó a 82 millones en el 2013 y 6 millones en el 2019, aseguró el Banco Mundial, saludando un ritmo “sin precedentes en la historia”.

El gobierno dice haber llegado a cero a finales del 2020.

Los responsables locales fueron de casa en casa para determinar las condiciones de vida, la cantidad de ganado y el nivel de escolarización.

El despegue económico, con un 8.2% de crecimiento medio anual entre 1978 y el 2020, permitió la aparición de empleos no agrícolas mejor pagados.

Entre el 2013 y 2021, las autoridades aseguran haber invertido 1,6 billones de yuanes (unos US$ 225 millones) contra la pobreza con proyectos como la construcción de carreteras, casas e infraestructuras.

Millones de hogares fueron reubicados en localidades más propicias al desarrollo económico. Esto no siempre fue bien recibido y algunos funcionarios han sido enviados a zonas rurales remotas en contra de su voluntad.

Xi Jinping lo reconoció a finales del 2020: “La tarea de consolidar y expandir los resultados de la lucha contra la pobreza es todavía difícil”.

Programa espacial

China ha cerrado en gran parte la brecha con Estados Unidos y Rusia.

En el 2013 consiguió alunizar un robot. En el 2019, plantó otro en la cara oculta de la Luna, el primer artefacto creado por el hombre en hacerlo.

En el 2020, trajo muestras lunares y finalizó Beidou, su sistema de navegación por satélite que quiere rivalizar con el GPS estadounidense.

Después de enviar su primer robot a Marte el año pasado, China debería terminar este año su estación espacial.

Enriquecimiento de los chinos

Entre el 2013 y el 2020, los ingresos disponibles medios por hogar urbano pasaron de 26,467 yuanes (US$ 3,720) anuales a 43,834 yuanes (US$ 6,160), según la Oficina Nacional de Estadísticas.

En los hogares rurales crecieron un 82% hasta los 17,132 yuanes (US$ 2,410).

Señal del enriquecimiento, en los hogares urbanos también subieron el número de coches (de 0,22 a 0,45) y de teléfonos móviles (de 2,17 a 2,49) entre el 2012 y el 2020.

La mayoría de jóvenes disfruta de una vida cultural y deportiva más rica que la de sus padres.

Pero los gastos de la vivienda se cuadriplicaron entre el 2013 y el 2020, haciendo caer la capacidad adquisitiva.

En 10 años, “ha habido un aumento muy importante de los ingresos de los trabajadores migrantes”, los campesinos llegados a trabajar a las ciudades, señala Jean-Louis Rocca, especialista en movimientos sociales chinos en la universidad SciencesPo de París.

“Pero con el encarecimiento de los alquileres, el coste de la educación, la necesidad de vestirse a la moda para integrarse, su situación, que ha mejorado en las ciudades medianas, se ha estancado o empeorado en las grandes metrópolis”, añade.

Lucha anticorrupción

Funcionarios, miembros del Partido, generales, dirigentes de empresas públicas, de bancos... Entre el 2012 y el 2022 se emitieron 11,3 millones de reprimendas para casos menores y se investigó a 4,7 millones de personas por acusaciones graves de corrupción, según la comisión nacional de disciplina.

Al menos 1,5 millones de casos terminaron en una sanción, en algunos disciplinaria pero otros en la pena capital.

La “frugalidad” se impuso en la administración: menos banquetes y licores caros, por ejemplo.

Celebrada por la opinión pública, esta campaña también sirvió a Xi Jinping para eliminar rivales políticos.

Y tampoco fue remedio total contra los abusos, especialmente en la China rural, donde los ciudadanos apenas pueden hacer valer sus derechos.

Medioambiente

Pekín firmó en el 2016 el acuerdo climático de París. En el 2020, Xi Jinping se comprometió a que su país alcanzará su pico máximo de emisiones de carbono para el 2030 y llegar a la neutralidad de carbono en el 2060.

Grupos medioambientales pidieron a China, el mayor emisor mundial de gases de efecto invernadero, actuar más rápido para poder alcanzar el objetivo de París de limitar el calentamiento global a 1,5 ºC.

Después de obviar o minimizarla durante largo tiempo, el Ministerio de Medioambiente empezó a publicar en el 2012 datos precisos sobre la contaminación atmosférica.

La concentración en el aire de partículas muy finas y peligrosas para la salud cayó un 34.8% en China entre el 2015 y el 2021, según el ministerio. La capital china se volvió mucho más respirable.

También avanza la recogida de residuos selectiva (obligatoria en Shanghái desde el 2019) y el gas reemplaza en la calefacción al carbón.

“La toma de conciencia general de la necesidad de proteger el medioambiente aumentó de manera significativa”, dice Wang Binbin, investigadora del cambio climático en la Universidad Tsinghua de Pekín.

Sin embargo, a falta de una alternativa inmediata, China anunció que continuará aumentando el uso de carbón en los próximos años, lo que pone en riesgo el cumplimiento de sus objetivos climáticos.

Transportes

La longitud de su red ferroviaria de alta velocidad se cuadruplicó, pasando de 9,300 a 40,000 km entre el 2012 y el 2021.

En diez años se construyeron 82 aeropuertos civiles, llevando el total nacional a 250. Y el número de pasajeros se duplicó entre el 2012 y el 2019.

Aunque costosas, estas infraestructuras facilitaron los desplazamientos, estimulando la economía y el desarrollo en el oeste del país, menos favorecido.