El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reconoció este sábado la adversidad que representa la emergencia del coronavirus y la “muy fuerte” crisis económica que se avecina, por lo que pidió a la gente permanecer en sus hogares, en un mensaje desde el norteño estado de Sonora.
"Esta crisis, esta pandemia, no la vamos a resolver en los hospitales, la tenemos que resolver en los hogares, con la prevención, lo que aquí recomendaba la gobernadora (Claudia Pavlovich), si no tenemos necesidad de salir vamos a mantenernos en nuestra casa", declaró en la ciudad de San Luis Río Colorado.
El exhorto del mandatario, que también hizo a través de un video publicado en Facebook, contrasta con lo que publicó él mismo en sus redes sociales el domingo pasado, cuando invitó a seguir consumiendo en los comercios pese a la presencia de Covid-19.
"Yo les voy a decir cuándo no salgan, pero si pueden hacerlo y tienen posibilidad económica, pues sigan llevando a la familia a comer a los restaurantes, a las fondas", indicó entonces en un video.
Sin embargo, dos días después el Gobierno mexicano declaró la fase 2 de la epidemia al registrar los primeros contagios comunitarios de coronavirus, que representan el 8 % de los 717 contabilizados en el último reporte oficial, que también precisa 12 muertes.
Desde entonces, el mandatario, que se había resistido a tomar medidas más drásticas, canceló el público en sus giras, como mostró su llegada este fin de semana al aeropuerto de Tijuana, en la frontera norte.
Además, emitió un decreto para suspender las actividades no esenciales del Gobierno federal, salvo en áreas consideradas estratégicas como salud, seguridad pública y energía, como parte de la Jornada Nacional de Sana Distancia.
"Va a pasar esta pandemia porque estamos actuando de manera responsable. Antes también eran los políticos los que decidían qué se tenía qué hacer, ahora nos estamos apoyando en los técnicos, en los médicos, en los científicos", aseveró".
Presume éxito de estrategia
Aunque su Gobierno ha evitado medidas severas implementadas en otros países, como el cierre de fronteras y el toque de queda obligatorio, el mandatario presumió el éxito de la estrategia al afirmar que “México es de los países menos afectados” por el coronavirus.
"A pesar de que llevamos pocos días, desde luego, si nos comparamos con países que llevan el mismo tiempo, desde el primer infectado, estamos abajo a nivel mundial, pero necesitamos seguir conservando esa disciplina para que no se desborde esta epidemia y que podamos salir pronto para reactivar la economía", aseguró.
En medio de la emergencia, el líder izquierdista ha insistido que no rescatará a las grandes compañías, por lo que en vez de incentivos fiscales ofreció 1 millón créditos por un total de 25,000 millones de pesos (US$ 1,068 millones) a pequeñas y medianas empresas formales e informales.
También dijo que existe un “blindaje” por los 500,000 millones de pesos (US$ 21,375 millones) en programas sociales destinados sobre todo a adultos mayores y personas con discapacidad, cuyos pagos se adelantarán ante la contingencia sanitaria.