Es poco probable que las startups más populares de México logren revivir el páramo de las OPI del país.
Empresas como el vendedor de autos usados Kavak, el prestamista para pequeñas empresas Konfio Ltd., el procesador de pagos Clip, y la plataforma de criptomonedas Bitso, han recaudado más de US$ 1,000 millones con inversionistas privados este año.
Pero cuando llegue el momento de salir a bolsa, probablemente estas empresa busquen seguir a sus pares latinoamericanos e intenten cotizar al norte de la frontera, dijo Martin Werner, un exbanquero de inversiones de Goldman Sachs que se convirtió en director ejecutivo para compañías de adquisión de propósito especial, conocidas como SPACs por sus siglas en inglés.
“Todas, desde las compañías tecnológicas más innovadoras, están pensando en ir al Nasdaq al momento de irse públicas, porque allí están los inversionistas y los comparables”.
Sin embargo, en Nasdaq existe el riesgo de que se pierdan entre la multitud. Al cotizar en México, las empresas probablemente obtengan más cobertura por parte de los analistas y ganen lugares en los índices nacionales, lo que ayuda a atraer flujos de inversionistas globales.
Los representantes de las cuatro nuevas empresas se negaron a comentar al respecto.
Han pasado 15 meses desde la última oferta pública inicial de una empresa en México y cuatro años de la última cotización cercana a los US$ 1,000 millones.
Desde el año pasado, cinco empresas han iniciado el proceso de desliste. La escena resulta contrastante con la del capital de riesgo en el que las empresas latinoamericanas, incluidas las de México, han recaudado un récord de US$ 11,270 millones este año con 180 acuerdos reportados en lo que va de octubre, o tres veces la cantidad en el 2020, según datos compilados por Bloomberg.
Kavak, por ejemplo, después de obtener US$ 700 millones en septiembre, alcanzó una valoración de US$ 8,700 millones. La gran cantidad de capital privado hace que ninguna de las nuevas empresas mexicanas se sienta presionada por cotizar pronto. Por su parte, SoftBank Group Corp., que respaldó a las cuatro nuevas compañías en el país, acaba de lanzar el mes pasado un segundo fondo latinoamericano.
Werner, quien ha traído dos compañías de adquisiciones especiales al Nasdaq, culpa a la liquidez como una razón por la que muchas compañías latinoamericanas seguirán favoreciendo las cotizaciones en Estados Unidos.
México carece de un mercado minorista fuerte para impulsar el comercio de empresas y tiene una industria local de fondos de pensiones altamente concentrada, donde cuatro de las diez empresas poseen el 65% de los fondos de los trabajadores, según datos de septiembre del regulador.
Desde el 2019, seis firmas brasileñas han cotizado en Nueva York, según datos compilados por Bloomberg, incluidas algunas de las nuevas empresas más valiosas del país. Y se avecina otro flujo importante, gracias a la startup más valorada de América Latina, Nu Pagamentos SA, el prestamista digital respaldado por Berkshire Hathaway Inc. del multimillonario Warren Buffett.
Nubank, como se conoce a la empresa, se está preparando para salir a bolsa en Estados Unidos, dijeron en agosto personas familiares con el proceso.