La economista jefa del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, dejará su cargo en la organización multilateral en enero del 2022 para regresar al Departamento de Economía de la Universidad de Harvard.
Así lo anunció la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en un comunicado en el que agradeció la contribución de Gopinath durante su etapa en ese cargo de liderazgo y aseguró que el impacto de su trabajo fue “tremendo”.
“Gopinath hizo historia como la primera mujer economista jefa del FMI y nos beneficiamos enormemente de su agudo intelecto y profundo conocimiento de las finanzas internacionales y la macroeconomía mientras navegamos por la peor crisis económica desde la Gran Depresión”, señaló Georgieva.
Gopinath sustituyó en el 2019 a Maurice Obstfeld, quien ocupaba el cargo desde el 2015, convirtiéndose así en la primera mujer en dirigir el prestigioso Departamento de Investigación del FMI.
De acuerdo con el FMI, la Universidad de Harvard había extendido un año el permiso de ausencia de Gopinath de manera “excepcional”, lo que le ha permitido estar al frente de la dirección económica del organismo con sede en Washington durante tres años.
Georgieva también explicó que la economista india se ganó el respeto y la admiración de sus compañeros del FMI “por liderar un trabajo analíticamente riguroso y proyectos relevantes para las políticas con alto impacto e influencia”.
El puesto que abandona ahora Gopinath, doctora en economía por la Universidad de Princeton, es clave en el organigrama del FMI, ya que es el encargado de coordinar los informes de previsiones globales que se publican semestralmente, considerados referencia para mercados y gobiernos.
Antes de unirse al Fondo, Gopinath era profesora de Estudios Internacionales y Economía de la Universidad de Harvard, centro al que regresará en unos meses.
Este anuncio llega en un momento complicado para el FMI después de que Georgieva fuese acusada recientemente de favorecer a China en el informe “Doing Business” cuando dirigía el Banco Mundial (BM).
El bufete de abogados Wilmer Hale señaló en un reporte divulgado el pasado 16 de setiembre que varios altos funcionarios del BM, entre ellos Georgieva, presionaron entonces desde dentro del organismo de manera “indebida” para mejorar la clasificación de China en su informe periódico “Doing Business”.
El presunto objetivo era mejorar su clasificación en un momento en que el BM buscaba el apoyo de Pekín para incrementar su capital, aunque Georgieva afirmó que está en desacuerdo “fundamental” con los hallazgos e interpretaciones de esa investigación independiente.
Por su parte, el directorio ejecutivo del FMI expresó la semana pasada su “confianza plena” en Georgieva al asegurar que la revisión de las acusaciones para favorecer a China no muestra “un papel inapropiado” por parte de la economista búlgara.