Un número creciente de bancos de Wall Street están dispuestos a negociar bonos rusos que antes se consideraban intocables.
JPMorgan Chase & Co. y Bank of America Corp. se encuentran entre varios bancos que se han ofrecido a facilitar transacciones de deuda corporativa y soberana en nombre de los clientes, según personas familiarizadas con el asunto que pidieron no ser identificadas.
Los bancos ahora están dispuestos a negociar transacciones después de que el Departamento del Tesoro dijera que no es una violación de las sanciones de Estados Unidos que las personas reduzcan sus posiciones, lo que agrega claridad sobre un tema que generó amplia confusión en el mercado.
Bank of America envió una nota a inversionistas la semana pasada diciendo que las transacciones son para aquellos que buscan salir de las tenencias de deuda rusa.
A raíz de la invasión a Ucrania y las duras sanciones de Estados Unidos, muchos bancos se retiraron de Rusia y dejaron de operar con los activos de la nación. Eso dejó a algunos inversionistas atrapados en posiciones profundamente en riesgo y, apenas el mes pasado, algunos no pudieron encontrar un corredor.
Los abogados dicen que a los inversionistas siempre se les ha permitido vender sus posiciones en conformidad con las reglas de las sanciones de Estados Unidos, pero el tema ha sido tan polémico que muchos corredores simplemente se negaron a hacerlo.
Dada la orientación reciente de la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), ahora hay más confianza en el mercado sobre las formas en que los bancos pueden negociar activos rusos sin infringir las reglas.
Barclays Plc y Jefferies Financial Group Inc. también han hecho ofertas a inversionistas, informó Bloomberg la semana pasada. Reuters reportó anteriormente el lunes que JPMorgan, Bank of America y Citigroup Inc. estaban participando activamente en el mercado.
Los representantes de JPMorgan, Bank of America y Citigroup declinaron realizar comentarios.
La OFAC otorgó una licencia el mes pasado que autoriza las transacciones necesarias para vender posiciones de deuda o acciones rusas. La licencia, que vence el 20 de octubre, también da la aprobación para comprar valores si es parte del proceso de venta.
Los precios de la deuda rusa han repuntado en las últimas semanas a medida que aumenta el comercio y los locales buscan activos para comprar con el dinero proveniente de las exportaciones de energía. El bono del Gobierno a 10 años se cotiza a 39 centavos por euro, frente al mínimo de 16 centavos de fines de junio, cuando los bancos se retiraron de la negociación.