Las fuerzas armadas israelíes se han hecho con el control este martes de un complejo de combate del grupo chií Hezbolá en Maroun al Ras, en el sur del Líbano y a escasos dos kilómetros de la frontera con el Estado hebreo.
La brigada Golani de la infantería halló el complejo en una de sus operaciones en el sur del país vecino, donde lleva a cabo incursiones “limitadas” desde el pasado 1 de octubre.
“El complejo de combate de Hezbolá incluía un edificio residencial y un olivar, en el que se encontró un lanzador cargado y listo para disparar contra comunidades del norte de Israel”, según un comunicado del Ejército.
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Las tropas descubrieron también infraestructuras subterráneas, escondites, viviendas y zonas de preparación que utilizaban los milicianos, así como armas y equipamientos militares.
El domingo, la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en Líbano (FINUL), advertía de su “profunda preocupación” por las actividades del Ejército israelí cerca de una de sus bases en el sureste de la misma localidad, Maroun al Ras, donde hay apostados cascos azules.
La FINUL, de la que forman parte 650 militares españoles, continúa desplegada en sus posiciones en el sur del Líbano en las áreas fronterizas con Israel a pesar de la invasión de las tropas hebreas.
Hezbolá dispara más de 100 cohetes contra Haifa y Galilea
Mientras, en Israel, las defensas antiaéreas detectaron este martes la llegada de más de un centenar de proyectiles contra el norte del país, principalmente sobre la ciudad de Haifa y áreas adyacentes de Galilea, disparados por Hezbolá desde el Líbano.
La mayoría de los proyectiles fueron interceptados y solo algunos cayeron en zonas abiertas, según informó el Ejército.
La llegada de los cohetes se produjo en dos tandas consecutivas: una primera de 85 proyectiles y una segunda de 20.
Los proyectiles activaron las alarmas antiaéreas en la ciudad norteña, pero también en las regiones de la Alta Galilea y Galilea Central.
El servicio de emergencias israelí, Magen David Amon, informó de que una mujer de 71 años sufrió heridas leves en un brazo por por metralla y fue evacuada a un hospital.
Una hora antes, otros 25 cohetes habían sido disparados desde el país vecino contra la región norteña de Baja Galilea y la ciudad de Tiberíades.
“Las FDI continuarán operando contra la amenaza de la organización terrorista Hezbolá en defensa del Estado de Israel y sus residentes”, aseguró el Ejército israelí en un comunicado.
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Israel dice haber matado a otro líder de Hezbolá en Beirut
Precisamente en uno de esos ataques el Ejército israelí aseguró este martes que sus fuerzas aéreas mataron en Beirut a otro comandante de Hezbolá, Suhail Husein Huseini.
El portavoz para medios árabes del Ejército israelí ha publicado en X que “aviones cazas llevaron a cabo una incursión precisa en Beirut” y eliminaron al miliciano, sin especificar qué día en concreto se produjo el ataque.
Por su parte, un comunicado castrense ha precisado que Huseini se ocupaba “del presupuesto y la gestión logística de los proyectos más sensibles de Hezbolá”, como la planificación de ataques de Siria o Líbano, y del traspaso de armas entre Irán y la milicia-partido libanesa.
Una cuarta división se suma a la ofensiva israelí en el Líbano
Además Israel informó este martes de que la División acorazada 146 comenzó ayer a realizar “actividades operativas limitadas, localizadas y específicas” en el suroeste del Líbano, sumándose a otras tres divisiones que ya habían sido convocadas tras la invasión terrestre hace ocho días.
Se trata de la primera división de reserva en el país vecino, que se une a las tres unidades permanentes que ya operaban en las áreas centrales y orientales del sur del Líbano.
“Desde el comienzo de la guerra, el cuartel general de la división 146 ha servido como una brigada regional defensiva y sus fuerzas se desplegaron en el norte de Israel, la Franja de Gaza y en Judea y Samaria (Cisjordania)”, detalló un comunicado castrense.
Con la incorporación de esta nueva división, Israel cuenta ya con más de 15,000 efectivos para su campaña en el Líbano, según el diario Times of Israel.
Aumentan a 250,000 las personas que han huido a Siria
Desde que el conflicto se extendió a Líbano, más de 2,000 personas han muerto, según datos del Ministerio de Salud Pública libanés, y 1.2 millones se han visto obligados a desplazarse por los constantes ataques israelíes.
Según la ONU, un millón de personas necesita ayuda para cubrir sus necesidades vitales en el Líbano, donde la destrucción de terrenos agrícolas o su abandono por parte de familias desplazadas por los bombardeos israelíes anticipan una pérdida considerable de la producción de alimentos.
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU proporciona a diario 150,000 comidas calientes o raciones para entre cinco y quince días, dependiendo de la capacidad para cocinar, precisó por teleconferencia desde Beirut el director del organismo en el Líbano, Matthew Hollingworth.
El representante del organismo declaró estar conmocionado por el nivel y la rapidez de la destrucción sufrida en el Líbano, donde hay 1.2 millones de personas afectadas por los ataques y numerosas comarcas y ciudades han quedado prácticamente en ruinas.
Por su parte, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) ha asegurado este martes que ya son 250,000 las personas que han escapado de los bombardeos en Líbano y han llegado a Siria, un país consumido a su vez por trece años de conflicto armado interno y con una economía por los suelos.
Tras visitar la frontera líbano-siria y ser testigo de este drama humano, el alto comisionado de la ONU para los refugiados, Filippo Grandi, destacó la urgencia de movilizar la ayuda humanitaria internacional para acudir en su auxilio, así como los recursos necesarios para este fin.