La Guardia Civil española une fuerzas en la campaña de concienciación FakeCoins con policías y fiscalías de quince países de Latinoamérica y Portugal con el fin de prevenir a las potenciales víctimas de las principales estafas relacionadas con el mercado de las criptomonedas.
Es también una página web dirigida a ciudadanos, policías y juristas en la que se ofrece por primera vez un canal de asesoramiento y denuncia a personas que hayan sido objeto de este tipo de fraudes en auge, cometidos por organizaciones criminales que no reparan en fronteras.
La campaña contará con la participación de autoridades policiales y judiciales de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, además de España y Portugal en Europa.
En concreto, Fakecoins advierte sobre las seis clases de estafas registradas por los expertos en ciberdelincuencia de las fuerzas de seguridad, entre ellas la “WebCoin” -la creación de páginas web de inversión falsas donde sustraen datos personales- o la “PiramiCoin” -estafas piramidales que prometen ganancias en criptodivisas-.
La campaña, presentada este martes en Madrid, es fruto del proyecto de la Unión Europea EL PacCTO, un programa de cooperación internacional contra el crimen organizado, así como de la Red Policial contra el Cibercrimen en Europa y Latinoamérica.
Además, se enmarca en una iniciativa de colaboración internacional que la Guardia Civil (cuerpo de seguridad español) ha lanzado con ayuda de la Fundación Internacional para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAP), un organismo de cooperación española que promueve intercambios con países de Latinoamérica.
En España se calcula que más de cuatro millones de personas han invertido al menos una vez en criptodivisas, un mercado no intervenido en el que la creciente actividad del crimen organizado supone una “amenaza” global ante la que hay que actuar, subrayó la directora general de la Guardia Civil, María Gamez.
Según datos ofrecidos por la Policía de Investigaciones de Chile, los delitos relacionados con el mercado de las criptomonedas aumentaron un 80% en todo el mundo en el 2021 respecto al 2020, alcanzando los US$ 14,000 millones defraudados.