La directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, vaticinó hoy la llegada de una recesión global, en un momento de crisis simultáneas por la guerra en Ucrania, los altos precios de la energía o los alimentos y los efectos adversos del cambio climático.
“La recesión está llegando, los indiciadores no son positivos en un momento en el que tanto el Banco Mundial como el Fondo Monetario Internacional han actualizado a la baja sus previsiones de crecimiento”, destacó Ngozi en la apertura del foro público anual de la OMC.
“Estamos al borde de una recesión global, pero al mismo tiempo tenemos que pensar en la recuperación, en regresar al crecimiento”, añadió en el foro que se celebra en Ginebra.
El mundo “está en un momento muy complicado, en ‘policrisis’ con impactos en la seguridad, en el clima, en la energía y los precios de los alimentos, golpeando a todos los países a la vez, por lo que no podemos seguir como si nada, tenemos que pensar ideas nuevas”, analizó la política nigeriana.
“Todo el mundo está sintiendo estos impactos, a menos que sean extremadamente ricos y vivan aislados”, bromeó Ngozi, “pero para los países de la OMC ciertamente no es una situación normal”.
La máxima responsable de la OMC subrayó que en el actual contexto casi la única respuesta que pueden dar los bancos centrales es la de subir los tipos de interés como están haciendo, aunque aseguró que “las repercusiones de estas subidas son muy graves para las economías en desarrollo y emergentes”.
“Estas economías también están ajustando sus políticas y subiendo tipos, pero las dictadas por los países desarrollados afectan a su deuda y a la salida de capitales, así que es difícil valorar estas medidas”, subrayó Ngozi.