El chef José Andrés defendió la necesidad de resolver el problema de la aceituna negra española en Estados Unidos, donde este producto está sometido a un arancel de 35%, ya que “cuanto más unidas estén (Europa y América) a nivel de comercio, es bueno para ambas”.
El cocinero, nacido en España pero nacionalizado estadounidense en el 2013, presentó en uno de sus restaurantes de Washington, el último jueves, la campaña “Pon a Europa en tu mesa. Ten un día de aceitunas con aceitunas españolas”, en colaboración con la Organización Interprofesional de la Aceituna de Mesa de España (Interaceituna) y la Unión Europea (UE).
“Creo que cada país tiene que proteger lo suyo, es lo correcto. Pero dentro de un orden. Lo mejor de la humanidad se ha visto en momentos donde el comercio y la globalidad bien llevada han beneficiado a un crecimiento económico en muchas partes del mundo”, explicó José Andrés al ser preguntado por la situación de la aceituna negra española en el país.
El producto está sometido a un arancel de 35% ya que las autoridades de Estados Unidos consideran que se vende por debajo de su precio de mercado al estar subvencionado por la Política Agrícola Común (PAC) de la UE.
Los aranceles han hecho perder a España su posición hegemónica en Estados Unidos, donde facturaba unos 70 millones de euros (cifras del 2017) y representaba cerca del 75% de las compras de aceituna negra que realizaba este país.
Las asociaciones estiman en 170 millones de euros las pérdidas del sector desde que entró en vigor el gravamen, en el 2018.
El país comenzó a sumar aranceles a la aceituna negra española después de que dos empresas estadounidenses denunciaran por “dumping” -vender por debajo del precio de mercado- a tres compañías españolas, Aceitunas Guadalquivir, Agro Sevilla y Ángel Camacho.
El presidente de Interaceituna, Ricardo Serra, cree que la acusación de competencia desleal es un “puro pretexto” que solo sirve para beneficiar a las empresas californianas que producen aceituna negra y a otros países productores, como Egipto.
“Si eso (el “dumping”) fuera cierto, la PAC de Europa está aprobada por la Organización Mundial del Comercio (OMC). Decir que la aceituna tiene una situación de ilegalidad por la PAC es negar la legalidad de la PAC y de la OMC”, aseguró Serra.
Las autoridades continúan imponiendo este arancel pese a que la OMC consideró a finales del 2021 que era incompatible con sus normas, y sólo lo han rebajado al 7.32% y por periodo de un año para cinco empresas españolas, tras llevar a cabo una revisión con el Estado de California.
La organización defiende además que, al tratarse de un problema con una política europea, debería ser la UE la que tomara cartas en el asunto “de forma seria”, proporcionando asistencia legal a las empresas españolas en su batalla por eliminar estos aranceles.
En este sentido, Serra admitió que el sector no renuncia a una suspensión total de los aranceles a la aceituna negra, como sí sucede, desde el 2021, con la aceituna verde o el aceite de oliva.
La campaña presentada este jueves, aunque no está directamente relacionada con el problema de la aceituna negra, tiene una vertiente profesional que busca defender la calidad de la aceituna negra frente a otros productores que no están afectados por el gravamen.
Ha recibido fondos de la UE y cuenta con el chef José Andrés como “embajador” del producto que aparece en varios videos mostrando formas de utilizar la aceituna para preparar diferentes platos.