El presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, prestó juramento este lunes para su segundo mandato de cuatro años al frente del banco central de Estados Unidos, dijo el organismo en un comunicado.
El lunes también juraron Lael Brainard como nueva vicepresidenta de la Fed, y los dos miembros más nuevos de la Junta de Gobernadores del banco central, Philip Jefferson y Lisa Cook, ambos economistas negros.
Cook es la primera mujer negra en servir en el directorio de la Fed. Esta es también la primera vez que la Fed tendrá más de un encargado de política monetaria negro al mismo tiempo.
La juramentación significa que seis de los siete escaños en el directorio de la Fed se llenan solo unas semanas antes de la reunión de política monetaria del banco central del 14 al 15 de junio, en la que se espera que suba su tasa referencial de préstamos a un día en medio punto porcentual en un momento en que lucha contra una inflación que marcha en máximos de 40 años.
Pausar alzas en setiembre
Por su parte, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, dijo que después de otras dos alzas de tasas de medio punto porcentual en las reuniones de junio y julio, “podría tener sentido” que la Fed pause nuevas subidas mientras evalúa el impacto en la inflación y la economía.
“Después de pasar el verano (boreal), y de pensar en dónde estamos en términos de política, creo que mucho dependerá de la dinámica sobre el terreno que estamos empezando a ver” tanto con la inflación como con el impacto de las tasas de interés más altas en la economía, señaló en comentarios al Rotary Club de Atlanta.
“Creo que una pausa en setiembre podría tener sentido” antes de determinar cuánto más o más rápido deben subir los tipos, agregó.
Señaló que la rápida respuesta de los mercados financieros al endurecimiento de la política monetaria ofrece la esperanza de que otras partes de la economía puedan ajustarse también más velozmente.
“Eso abre alguna posibilidad de que partes de la economía respondan más rápidamente” a unas tasas de interés más altas y, a su vez, ayude a frenar la demanda y la inflación, dijo.
“Tenemos que mantener los ojos abiertos. Esto es realmente una cuestión de dos caras” en la que la Fed tiene que estar preparada para acelerar o ralentizar el ritmo de las subidas de tasas en función de cómo reaccione la economía.