La violencia armada y los tiroteos masivos suelen aumentar en los meses veraniegos en Estados Unidos, especialmente posterior del Día de la Independencia, históricamente uno de los días más mortíferos del año en el país.
Una serie de tiroteos alrededor del feriado el año pasado dejó más de una docena de muertos y más 60 heridos. Hace dos años, otro tiroteo masivo en un desfile del 4 de julio dejó siete muertos en Chicago. La madre de un niño de 10 años que quedó paralítico por el ataque dijo el miércoles que su familia no irá este año al desfile, que se realiza por primera vez desde el tiroteo.
“No sé si jamás podré asistir al desfile nuevamente”, dijo Keely Roberts, quien también resultó herida.
LEA TAMBIÉN: Las mejores series y películas sobre el Día de la Independencia de Estados Unidos
LEA TAMBIÉN: 4 de julio: estos son los presidentes de Estados Unidos que murieron en el Día de la Independencia
El Gun Violence Archive, que lleva la cuenta de los tiroteos masivos de cuatro o más personas en Estados Unidos, independientemente de si murieron o no, muestra que junio, julio y agosto han tenido la mayor cantidad de tiroteos masivos en la última década. La menor cantidad se registra entre diciembre y marzo.
El Día de la Independencia estaba al tope de la lista con 58 tiroteos masivos en los últimos 10 años, seguido de cerca por el 5 de julio, según el archivo.
“Son las reuniones, el tiempo de ocio, la ingesta de alcohol”, dijo James Alan Fox, criminólogo y profesor de la Northeastern University, quien supervisa una base de datos sobre violencia armada mantenida por The Associated Press y USA Today en asociación con la universidad.
La primera mitad de este año, hubo 19 matanzas (14 de ellas a tiros) con por lo menos cuatro muertos en Estados Unidos, según la base de datos. En 2023, la nación registró la mayor cantidad de tiroteos masivos (39) desde que se empezó a llevar la cuenta.
Los expertos mencionan una combinación de factores que históricamente inciden en que la violencia armada aumente en los meses del verano.
Las matanzas suelen ocurrir en viviendas privadas y en la mayoría de los casos, las víctimas eran familia o conocidas del perpetrador.
Cuando no hay clases y empiezan las vacaciones de verano, las familias tienden a pasar más tiempo juntas, los niños pasan más tiempo en casa y aumenta la probabilidad de más víctimas cuando todos están bajo el mismo techo, dijo Jesenia Pizarro, profesora de criminología de la Universidad Estatal de Arizona.
Al mismo tiempo, los adolescentes en esa época del año tienden a tener más tiempo libre. “Es como que las oportunidades aumentan en el verano”, dijo Pizarro.