Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, en inglés) dieron este jueves el aval final a las dosis de refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer para los jóvenes de 16 y 17 años.
La autorización se produce después de que Estados Unidos urgiera a todos los adultos a ponerse una dosis de refuerzo ante la nueva variante del COVID-19, denominada ómicron.
“Aunque no tenemos todas las respuestas sobre la variante ómicron, los datos iniciales sugieren que las dosis de refuerzo del COVID-19 ayudan a ampliar y fortalecer la protección contra ómicron y otras variantes”, dijo en un comunicado la directora de los CDC, Rochelle Walensky.
El aval final de Walensky se produjo horas después de que la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, en inglés) diera una autorización de emergencia para que menores de 16 y 17 años puedan ponerse la dosis de refuerzo seis meses después de recibir la segunda inyección del suero de Pfizer.
El miércoles, se hicieron públicos los resultados de unos estudios de Pfizer y BioNTech que muestran que las dosis de refuerzo podrían ayudar a activar el sistema inmune frente a ómicron, detectada por primera vez en Sudáfrica.
Hasta ahora, unas 200 millones de personas se han vacunado por completo en Estados Unidos, es decir, que han recibido o bien las dos dosis de las vacunas de Pfizer y Moderna, o una inyección del preparado de Johnson&Johnson, lo que representa el 60.4% de la población del país, según los CDC.
De acuerdo con esos datos, a 48.8 millones (24.4% de la población) se les ha administrado una dosis de refuerzo.
Estados Unidos es el país más golpeado por la pandemia de COVID-19 con casi 800,000 fallecidos y 45.5 millones de contagios desde marzo de 2020, indica el recuento de la Universidad Johns Hopkins.