Los precios del petróleo bajaron fuertemente el miércoles antes de limitar sus pérdidas al final de la jornada, en medio de temores de una recesión en Estados Unidos.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en agosto terminó así en baja de 2.53% a US$ 111.74, tras llegar a perder más de 4% durante la sesión en Londres.
El barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en agosto cayó por su parte 3.04% a US$ 106.19, luego de caer más de 7% durante la jornada en Nueva York.
“Los temores de una recesión y la reunión (prevista para este jueves) entre representantes de la industria petrolera estadounidense y el presidente Joe Biden, son citadas como las razones de esta nueva caída de precios”, comentó Carsten Fritsch, analista de Commerzbank.
Para Phil Flynn, de Price Futures Groups, la caída de precios del crudo no tiene que ver con el pedido de Joe Biden al Congreso para que suspenda por tres meses un impuesto federal de 18 centavos de dólar sobre el galón de gasolina (3.78 litros).
“Las razones por las que los inversores vendieron residen en los fuertes temores de recesión”, afirmó Phil Flynn, que cita una nota de Citibank que evoca riesgos aumentados de fuerte desaceleración económica y las interrogantes persistentes sobre la recuperación de actividad en China tras los confinamientos por el COVID.
Pero para Ricardo Evangelista, analista de ActivTrades, la caída de precios del crudo es “un ejemplo de reacción negativa de los mercados a la incertidumbre generada por una intervención política” de la Casa Blanca.
En cambio, la intervención del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, ante el Senado este miércoles, sostuvo los precios, según Flynn.
Aunque no excluyó la posibilidad de una recesión si las tasas suben demasiado rápido, Powell afirmó que la economía estadounidense es “muy sólida” y capaz de soportar los ajustes monetarios (subida de tasas de interés de referencia).
“Dijo lo que era necesario para hacernos subir. Parecería, según él, que la próxima medición del Producto Bruto Interno (PBI) no será negativa, sino positiva, lo cual, técnicamente, borra el escenario de una recesión”, que se considera cuando se producen dos trimestres consecutivos de contracción del producto interno bruto, sostuvo Flynn, analista de Price Future Group.
Por otra parte, “si el presidente Biden nos ofrece un alivio fiscal sobre la gasolina, eso aumentará aún más la demanda, pondrá bajo tensión la capacidad de las refinerías... y hará subir los precios nuevamente”, vaticinó Phil Flynn.