La variante ómicron llegó por primera vez a los centros políticos, financieros y tecnológicos de China, ejerciendo presión sobre la respuesta del país a la variante más transmisible mientras espera que comiencen los Juegos Olímpicos de Invierno en menos de tres semanas.
China ha detectado infecciones por ómicron de transmisión local en Pekín, la capital; Shanghái, el centro financiero; y Guangdong, donde se encuentra el centro tecnológico del sur de Shenzhen; que en conjunto representan una quinta parte del producto interno bruto del país. La variante altamente contagiosa ha sido detectada en una de cada cinco provincias, mientras que 14 de ellas han reportado casos importados.
Si bien aún son muy pequeños en número, los brotes están causando consternación debido a su momento, además de su ubicación. El feriado del Año Nuevo Lunar, un evento marcado por los viajes masivos cuando millones regresan a casa desde los centros urbanos para asistir a grandes reuniones familiares, comienza el 1 de febrero. El inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín está programado para el 4 de febrero.
Los JJ.OO. de Pekín no venderán boletos al público en general, pero permitirán la presencia de espectadores “organizados”, dijo el comité organizador el lunes por la noche. La decisión de eliminar la venta de boletos al público se tomó para garantizar la salud y la seguridad del personal relacionado con los Juegos Olímpicos y del público en medio de una situación de control de virus sombría y complicada, dijo.
Impacto duradero
La propagación de ómicron se suma a un brote de la variante delta del COVID-19 que se ha estado extendiendo por el país más poblado del mundo durante más de un mes. El domingo, se encontraron al menos 166 casos domésticos en China, según la Comisión Nacional de Salud. El último epicentro, observado en la ciudad norteña de Tianjin, reportó un récord de 80 nuevos casos diarios.
Los brotes anteriores tuvieron lugar en áreas económicamente menos importantes, como la ciudad noroccidental de Xi’an y la provincia central de Henan. El surgimiento simultáneo de ómicron en Pekín, Shanghái y Guangdong está creando mayores obstáculos para las autoridades de Gobierno, ya que los esfuerzos agresivos para contener el virus, incluidas las medidas de bloqueo, son menos factibles en áreas política y económicamente cruciales.
Los Gobiernos locales están aumentando medidas específicas como parte del enfoque “cero COVID”. Las pruebas existentes pueden detectar ómicron, lo que brinda tranquilidad sobre su capacidad para ayudar a contener los brotes, dijeron los funcionarios en una sesión informativa de la comisión de salud durante el fin de semana.
Una de las estrategias clave de China es realizar varias veces pruebas masivas a toda la población de las ciudades para erradicar la propagación no detectada.
Las políticas ya implementadas han socavado el consumo privado, lo que ha frenado el turismo y el gasto en restaurantes en los últimos dos años. Es probable que el aumento de los casos de ómicron restrinja aún más los viajes antes del Año Nuevo Lunar, al tiempo que muchas ciudades están pidiendo a las personas que no viajen.