La fuerte expansión de las operaciones con activos virtuales (criptomonedas) en los últimos años en el Perú plantea la obligación de contar con una regulación que evite que esta actividad sea usada por delincuentes para lavar dinero o estafar.
Así lo señaló Sergio Espinosa, superintendente adjunto de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), quien adelantó que en el corto plazo esa institución (adscrita a la SBS) presentará al Ministerio de Justicia una propuesta legal para regular a las empresas proveedoras de criptomonedas en materia de lavado de activos y financiamiento del terrorismo.
“Hoy existe una mayor presencia de este tipo de activos en las transacciones económicas y comerciales del día a día en el país, algo que antes no se veía”, refirió en el “2do Seminario Virtual de Prevención del Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo”, organizado por Asbanc.
-Mercado-
Un estudio sectorial de riesgos sobre el mercado de activos virtuales, realizado por la UIF junto con la agencia de cooperación alemana GIZ, encontró que Perú tiene el tercer mercado de activos virtuales más grande de la región.
En el 2019 hubo 7,000 transacciones con bitcóin en el país, lo que equivale a un mercado actual de S/ 213 millones, señala el estudio.
“La cantidad de dinero que se mueve en las transacciones no es solo un riesgo para el lavado dinero, sino también para esquemas de fraude y falsas inversiones como los esquemas de tipo piramidal”, advirtió Espinosa.
Explicó que las transacciones con monedas virtuales posibilitan el anonimato pues es inexistente o reducida la exigencia de datos de identificación de los usuarios. Se complican las posibilidades de rastrear el dinero y, por tanto, es un mecanismo atractivo para actividades criminales, dijo.
El problema se agrava cuando se trata de plataformas de activos virtuales que operan en varios países.
-Proveedores-
Por eso mismo, el Grupo de Acción Financiera (GAFI), organismo intergubernamental que promueve el combate contra el lavado de activos y financiamiento del terrorismo, ha recomendado a sus países miembros que regulen, registren y supervisen a los proveedores de activos virtuales locales, refirió el funcionario.
En tal sentido, la UIF buscará que las empresas proveedores de los activos virtuales que operen en el Perú sean sujetos obligados a reportar a esa unidad; es decir, que deben registrarse, contar con un oficial de cumplimiento e informar a la UIF sobre operaciones sospechosas de sus clientes.
Regulaciones adicionales dependerán de las políticas de cada país, acotó Espinosa. Hay países que han prohibido los activos virtuales, mientras que otros incluso han reconocido al bitcóin como moneda de curso legal, añadió.
-Dinero sucio-
En la pandemia, la UIF detectó un incremento del dinero sucio proveniente de la corrupción, ciberdelitos y fraudes, en un contexto donde el número de operaciones electrónicas a través del sistema financiero creció. “Los fraudes y extorsiones en línea van a continuar”, estimó el jefe de la UIF.
En adelante, la UIF dará prioridad a la supervisión preventiva y remota de los sujetos obligados a reportar, manteniendo las visitas in situ sobre todo para las entidades financieras.