Marco Alva | Omar Manrique
El programa Reactiva Perú, lanzado ayer por el Gobierno, es considerado clave para proteger la economía del país frente a los efectos negativos causados por el Covid-19.
Sin embargo, tal como ha sido diseñado, no logrará su objetivo de evitar que la mayor cantidad de empresas quiebre y despida personal, advirtió Alonso Segura, exministro de Economía.
Estimó que si no se corrige esta medida no ayudará a salvar a las empresas que hoy tienen problemas para pagar a proveedores y trabajadores.
Reactiva Perú busca evitar que la cadena de pagos se rompa mediante la entrega de créditos garantizados por el Estado, con los cuales los negocios podrán pagar sus obligaciones de corto plazo.
Segura señaló que el esquema final de este programa aprobado por el Gobierno desnaturaliza la propuesta original anunciada por el Banco Central de Reserva (BCR) y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
“El MEF no ha entendido que lo que propuso el Banco Central es una facilidad de liquidez, un repo con el que busca inyectar liquidez rápidamente. Han convertido más bien esta medida en un mecanismo de crédito con garantía que, por definición, es otra cosa, es mucho más lento, requiere evaluación crediticia y, por tanto, requiere filtración”, sostuvo el economista.
Errores
Consideró que son dos los principales errores del esquema Reactiva Perú. En primer lugar, no se dio la cobertura estatal de 100% para los préstamos a las empresas más pequeñas, como había anunciado el presidente del BCR. La garantía del Estado para estos casos llegará a 98%, según la norma publicada.
“Ese 2% de diferencia puede parecer poquito, pero es infinito en términos matemáticos, porque significa que los bancos tienen que arriesgar capital y hacer una evaluación crediticia a 350,000 empresas que supuestamente son el objetivo”, dijo Segura. Ello no solo retrasa la entrega de préstamos que son urgentes, sino que los hace más restrictivos, con lo que se van a tener más quiebras y despidos, dijo.
Sostuvo que una situación extrema, como la que se vive hoy, exige tomar más riesgo moral (de un mal comportamiento de bancos y empresas beneficiarias) en la aplicación de un esquema con garantías al 100%.
La ministra de Economía, María Antonieta Alva, ha señalado que los niveles de garantías aprobados han sido validados por los bancos. “Los bancos tienen en cierta forma conflicto de intereses. Sus intereses no son los mismos que los del Estado”, refirió Segura. El MEF debe explicar por qué desoyó la recomendación del BCR, enfatizó.
Insuficiente
Otro error del actual Reactiva Perú es que redujo el umbral de los montos de los préstamos con garantía estatal para las empresas, de tres meses de ventas a uno, en el mejor de los casos, señaló Segura.
“Aunque muchas logren subsistir hasta que consigan financiamiento, muy probablemente un mes no les sea suficiente e igual se vayan al agua. Entonces, es lamentable que hayan anunciado algo y no se haya cumplido”, dijo. Además, criticó que se haya tomado como criterio para establecer el límite de los préstamos garantizados las contribuciones de la empresa a Essalud. “Es absurdo”, opinó.
Para Segura, la participación de Cofide en Reactiva Perú debería ser ex post a los desembolsos de créditos. “Lo que ha hecho el Gobierno es un Frankenstein, un esquema enredado, que va a generar demoras y costos para el Estado y los bancos, que los van a trasladar a los clientes. Se han metido cabe innecesariamente porque han recibido la información, pero simplemente han decidido seguir”, manifestó.
Descontento en empresas por monto máximo de créditos con garantía del Gobierno
El monto máximo de los créditos con garantía del Gobierno, en el marco del programa Reactiva Perú, no cubriría las expectativas de varias empresas.
Y es que el tope de estos préstamos se fija tomando como referencia el monto menor entre el equivalente a tres veces la contribución anual de la empresa a Essalud y un mes promedio de ventas en el 2019, precisó Guillermo Ferrero, socio del Estudio Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría.
Como la contribución de las medianas y grandes compañías a Essalud suele ser baja porque optan por la cobertura de las EPS (empresas prestadoras de servicios de salud) y, por tanto, muy inferior al importe de un mes de ventas, en la práctica solo podrán acceder a créditos de menor volumen en Reactiva Perú, explicó el especialista.
En la práctica, medianas y grandes empresas solo podrán acceder a préstamos garantizados por monto muy inferior a S/ 10 millones, según Guillermo Ferrero. Sostiene que con una garantía menor al 100% créditos no llegarán rápido a compañías.
“Los S/ 10 millones establecidos como monto máximo para adjudicar a medianas y grandes empresas en este programa es importante, pero solo podrán pedir un monto mucho menor pues prevalecerá el concepto (tope) de tres veces la contribución anual a Essalud, que es bajo para estas empresas”, expresó.
“A los clientes de sectores como centros comerciales, gerentes de entidades financieras y otras empresas no ha caído bien esto, porque el monto mensual de sus gastos es varias veces mayor que la contribución a Essalud”, añadió.
Garantía total
Así, Ferrero sostuvo que se restringirá el número de empresas a las que el programa gubernamental de garantías podría beneficiar.
Otro de sus reparos al decreto legislativo de este esquema, emitido el último lunes, es que la garantía del Estado no cubrirá el 100% del crédito otorgado, pese a que inicialmente el Gobierno apuntaba a ello al tratarse de una medida de emergencia sin precedentes para afrontar el grave impacto del coronavirus en la economía, y en la liquidez de las empresas en particular.
“Se requiere de una garantía total (al 100%) para que los préstamos sean canalizados a las empresas oportunamente. Si la garantía es menor, las áreas de riesgo y legales de los bancos tendrán que tomarse un tiempo para analizar en detalle la calidad del deudor”, dijo.
“Con una garantía menor al 100% el crédito no llegará tan rápido a la empresa”, agregó al manifestar su preocupación pues, asimismo, para la ejecución del programa falta emitir su reglamento operativo, la resolución ministerial de aprobación de garantías, el contrato de fideicomiso de titulización entre el MEF y Cofide, entre otros aspectos legales.
“Preocupa, entonces, que el programa no funcione con la eficiencia, rapidez y severidad que el Gobierno busca en esta situación de crisis”, enfatizó.
Pese a ello, Ferrero consideró que Reactiva Perú es un buen esquema para inyectar liquidez a las empresas, aunque para ello deberán hacerse los ajustes bien en la norma o en el reglamento a emitir.
El Dato
Deudas. Las empresas que tomen crédito de Reactiva Perú no podrán pagar deudas asumidas anteriormente hasta que cancelen el primero, según Ferrero.