La pandemia del COVID-19 fue un catalizador para la expansión de los pagos digitales en Latinoamérica, especialmente entre las empresas pequeñas y micro, según un nuevo estudio llevado a cabo en la región por la firma de pagos electrónicos Visa.
Las restricciones a la movilidad y la promoción de las transacciones sin contacto físico aceleraron un proceso de adopción tecnológica que antes del 2020 avanzaba a un ritmo mucho más lento, aunque a día de hoy casi la mitad de los pequeños negocios latinoamericanos ya aceptan pagos electrónicos.
“El cambio que se ha producido en doce meses es equivalente al que en condiciones normales se hubiera producido en diez años”, dijo en una entrevista con Efe el vicepresidente y jefe de Soluciones Comerciales de Visa para Latinoamérica y el Caribe, Juan Pablo Cuevas.
De todos los negocios que empezaron a aceptar pagos electrónicos durante la pandemia, el 80% fueron empresas pequeñas o microempresas, y los sistemas más populares de nueva adopción fueron los códigos QR (32%), las ventas a través de la página web (30%) y los pagos sin contacto mediante tarjetas o teléfonos celulares.
Sin embargo, el gran reto para la región, apunta el informe, son el 53% de pequeñas empresas que todavía no aceptan sistemas de pago electrónicos, lo que se traduce aproximadamente en 21 millones de negocios.
“Si uno pasaba antes frente a una pequeña tienda a tomar un café, con la pandemia, el café tenía que llegarle a casa, pero el tendero no sabía ni cómo mandarlo ni cómo cobrar al cliente”, señaló Cuevas, quien explicó que el gran reto de Visa durante esos meses fue ayudar a abrir canales para que estas pequeñas empresas pudieran posicionarse en el entorno digital.
El estudio indica que el mercado compensó a quienes aprovecharon la coyuntura pandémica para dar el salto al mundo digital: los negocios que adoptaron sistemas de venta online vieron crecer sus ventas en el 74% de los casos, al igual que el 82% de los que adoptaron pagos electrónicos en persona (con tarjetas, celulares...).
Uno de los aspectos que más siguen preocupando a los pequeños empresarios en Latinoamérica es el fraude, por lo que contribuir a aumentar la confianza y familiaridad con los pagos electrónicos es uno de los principales retos de Visa y de todo el ecosistema de cara al futuro.
El estudio de Visa y Americas Market Intelligence se llevó a cabo mediante entrevistas a 600 empresas pequeñas y micro, entre mayo y junio del 2021, en Brasil, México, Colombia, Argentina, Chile y Perú.