El Gobierno anunció que en los próximos días solicitará facultades legislativas al Congreso.
Si bien aún no se han dado detalles, el ministro de Economía, Pedro Francke, adelantó que una de las medidas que se prepara es implementar un nuevo régimen tributario simplificado para las micro y pequeñas empresas (mypes).
Al respecto, especialistas tributarios saludaron que se tenga previsto simplificar el régimen tributario para las mypes pero propusieron que este cambio deba venir acompañado por incentivos laborales, para así evitar que fracase en su objetivo de elevar la formalización.
Walker Villkanueva, socio del estudio PPU, refirió que se deberían homogeneizar los parámetros usados para definir a las mypes tanto en el campo tributario como laboral. “No tiene sentido que existan definiciones distintas; se tiene que simplificar”, subrayó.
Asimismo, para las mypes propone una reducción en los costos laborales. “No deben tener el mismo costo laboral que empresas más grandes. Si el costo laboral para ellas es 40%, para las mypes debería ser de 10%”, refirió.
Por su parte el abogado tributarista José Verona refirió que un incentivo laboral para las mypes sería reducir sobrecostos en caso de contratación de familiares. Propone que en esos casos solo corresponda el pago de la remuneración.
“Si doy trabajo a familiares hasta el segundo grado de consanguineidad solo debería pagar el sueldo, sin gratificaciones, CTS o vacaciones. Pues es una barrera para la formalización y muchos solo hacen una simulación con el familiar pues no llegan a pagar estos beneficios”, anotó.
Simplificación tributaria
Respecto al nuevo régimen tributario para las mypes, Villanueva subrayó que el RUS no ha funcionado, pues alienta a que la empresa se fragmente, mientras que el régimen mype tributario no ha tenido gran acogida.
“Para simplificar, se debe tener un único tributo, sobre las ventas, que reemplace a la renta e IGV. Y se debe permitir a los microempresarios emitir facturas, pues hoy solo pueden dar boletas”, indicó.
Explicó que actualmente no se les permite emitir facturas pues había el riesgo de fraude. Se temía que estas empresas podrían aprovechar las facturas para usarlas como gasto al momento de tributar. Villanueva refiere que este riesgo en los últimos años ha disminuido debido a que ahora la Sunat cuenta con información cruzada de las operaciones entre las empresas.
“Incluso también se debería pensar en incentivos financieros. Por ejemplo, decirles que si se formalizan podrían acceder a créditos a bajas tasas de interés”, anotó Villanueva.
Por su parte Verona refirió que el nuevo régimen tributario para las mypes debe simplificarse eliminando requisitos como el llevar libros contables.
“Se está migrando a la facturación electrónica, por lo que ya no es necesario los libros contables; la Sunat ya cuenta con la información; con eso quitas barreras a la formalidad”, sostuvo.
Asimismo, Verona coincide en que el RUS “está condenado a muerte”. Para que una mype sea considerada en el nuevo régimen, propone establecer topes de ventas anuales y no mensuales, para así dar flexibilidad a las empresas.
“El RUS es muy rígido, no considera la estacionalidad que puede tener un negocio, con meses donde se venda más. Se debe fijar un tope anual y no mensual”, apuntó Verona.