Jaime Reusche, vicepresidente de Grupo de Riesgo Soberano de Moody’s analiza el impacto en exterior en los inversionistas y los costos de financiamiento local para el Gobierno. Al respecto comenta.
Ayer el Congreso promulgó la liberación del 25% de las AFP, sin que el Gobierno lo haya observado ¿Cómo evalúan este escenario?
Por nuestro lado nos ha causado bastante sorpresa de que el Ejecutivo no haya observado la ley que permite el retiro del 25% de los fondos de la AFP, más aún cuando el miércoles el Gobierno anunció la liberación de S/ 3,000 de las AFP, en tres meses. Esta decisión va en contra de lo promulgado por el Congreso, que daba a entender que tenía la posición de observar la ley, pero no se hizo. Ahora se tiene que esperar cómo se implementarán ambas normas.
¿Debió enviar su observación, aun cuando se sabía que se iba a aprobar por insistencia?
Lo que parece ser es que el presidente (Martín Vizcarra) no ha querido enfrentarse al legislativo por algún tipo de cálculo político. El Gobierno se lavó las manos claramente, y no escuchó a sus tecnócratas que ya han medido el impacto de esta medida, que está vulnerando a un inversionista institucional.
¿No escuchó al MEF?
Es claro que el MEF se opuso a la medida, y claro que la justificación está basada en criterios técnicos, entonces si deja algo de preocupación todo este tema en el cual, como bien dices, la ley tal vez debió aprobarse por insistencia del Congreso, no que el Ejecutivo lo deja pasar.
¿Cuál es la lectura de los inversionistas?
Los inversionistas sorprendidos ante el silencio del gobierno, por otro lado, ya se habían resignado a que se iba aprobar la ley, probablemente por la insistencia del Congreso; pero si deja un cierto nivel de preocupación de que se pueden dejar pasar estas medidas populistas, por razones políticas o por razones de indecisión. Si deja un sabor amargo a los inversionistas.
¿Y por su lado, como Moody’s?
Por nuestro lado nos causa algo de preocupación que el Ejecutivo es quien tiene que articular bien su plan económico escuchando a las instituciones económicas como el MEF, BCR y la SBS, para ver lo mejor que es el manejo macrofiscal y macrofinanciero del país. Si deja algo de preocupación.
Los fondos no están en las AFP, sino invertidos ¿qué pasará ahora? ¿qué efectos tendría?
Los inversionistas verán la venta de los activos que puedan generar las AFP, ello puede elevar el costo de financiamiento de los bonos domésticos. Vimos cómo el Gobierno salió a financiarse en el exterior en moneda extranjera y sacó costos bastantes favorables y seguro saldrá a fondearse fuera del país. Por un lado, tiene sus ventajas, pero también tiene sus ventajas fondearse en la moneda nacional, que es lo que todo país busca a costos razonables. Eso hace que el costo de financiarse en soles sea un poco más caro para Gobierno.
El retiro del 25% de los fondos de las AFP es complicado en una coyuntura normal, pero ¿es el momento oportuno en este escenario de crisis por la pandemia?
Esta exacerbando las medidas de estrés financiero que estamos viendo en el sector bancario, financiero y empresarial. Y también nos habla de algo de improvisación. Si vemos las medidas es una daga que se manda a las AFP, más que por la necesidad de ayudar a los contribuyentes. No se ha dado una medida similar para los contribuyentes a la ONP.
Si vemos desde un punto de vista más técnico, los contribuyentes a la ONP típicamente son los más vulnerables, son los de mayores necesidades, y a ellos no se les está dando ninguna flexibilidad de sacar las contribuciones a las ONP dado como está concebido el sistema. Ellos son los que más necesidades tendría de acceder a esos fondos. Típicamente quien contribuye a una AFP por lo general es un trabajador formal y es una persona que puede tener un volumen de contribuciones mayor al que contribuye a la ONP.