Los cargos anuales de tratamiento y refinación (TC/RC) para el concentrado de cobre en el 2022 aumentarán desde los niveles de este año, dijeron analistas, fundiciones e incluso mineras, poniendo fin a una racha de seis caídas consecutivas en un indicador de la industria ampliamente observado.
De alrededor de una docena de analistas y fuentes de la industria encuestadas por Reuters, la mayoría estimó un acuerdo entre la minería y las fundiciones de US$ 60 a US$ 70 por tonelada y de seis a siete centavos por libra. Las cifras se comparan con el punto de referencia de TC de US$ 59.50 por tonelada para este año.
Las empresas mineras, que pagan a las fundiciones una tarifa de TC/RC para que procesen su mineral en metal refinado, llevan mucho tiempo a la cabeza en las negociaciones, ya que la creciente capacidad de las plantas ha ajustado el mercado de concentrados.
“Los desarrollos recientes quizás fortalezcan la posición de las fundiciones, incluido el efecto de la escasez de energía”, dijo el analista de CRU Erik Heimlich, en referencia a las restricciones de electricidad en China -el principal consumidor de cobre- que ha reducido las tasas de operación de los productores de metales, recortando la demanda de materia prima.
El índice clave de cobre TC, al que se hace referencia en los contratos de suministro a nivel mundial, generalmente se toma del primer acuerdo entre una gran minera y una fundición china en la “temporada de negociaciones” del cuarto trimestre, que comienza formalmente con la reunión de la Bolsa de Metales de Londres (LME) esta semana.
El índice ha disminuido constantemente desde US$ 107 en el 2015 y el acuerdo del 2021 fue el más bajo en diez años, reduciendo los márgenes de las fundiciones.
Sin embargo, el próximo año, el escaso suministro de las minas se aliviará y las fundiciones, que se han visto impulsadas por el aumento de los precios del subproducto ácido sulfúrico, han visto un CT al contado en China elevarse al doble, desde un mínimo de una década en abril a alrededor de US$ 60 por tonelada.
Esto ocurrió en parte gracias a la puesta en marcha en mayo de la mina Kamoa-Kakula de Ivanhoe en la República Democrática del Congo, señaló el analista de BMO Colin Hamilton, quien pronostica un acuerdo de US$ 62.50 para el 2022.
Analistas de Macquarie esperan que la producción mundial de minas de cobre aumente un 5.7% el próximo año, a alrededor de 22.2 millones de toneladas, frente a un incremento mucho menor de 1.1% este año. Eso hará que el mercado de concentrados cambie a un superávit de 26,000 toneladas en el 2022 desde un déficit de 70,000 toneladas el año pasado, afirmaron.
La firma CRU también proyecta un superávit de menor a mediano el próximo año, afirmó Heimlich. Sin embargo, agregó que persisten los riesgos de suministro, sobre todo porque las minas del principal productor de cobre del mundo, Chile, enfrentan restricciones en la extracción de agua y el yacimiento Las Bambas en Perú se ha visto afectado repetidamente por bloqueos de comunidades locales.
Por el lado de la demanda de concentrados, la consultora prevé un crecimiento “saludable” de la producción de fundiciones de alrededor de 3% el próximo año, manifestó el analista Craig Lang.
Una de las fundiciones de cobre más grandes de China, Daye Nonferrous, tiene previsto poner en marcha una planta con capacidad para procesar 400,000 toneladas anuales en el 2022.