Los precios del cobre podrían subir otro 10% durante el primer semestre del año a medida que el mercado responda al estímulo global y la demanda verde, según uno de los mayores operadores de metales de China.
El cobre en Londres alcanzó un máximo de ocho años a principios de este mes y ronda los US$ 8,000 por tonelada, un repunte de alrededor de 80% desde las profundidades de la pandemia en marzo.
Los precios podrían subir a US$ 8,800, señaló el viernes He Jinbi, presidente de Maike Metals International Ltd., en una entrevista en la oficina en Shanghái de la compañía con sede en Xian. Sería su mejor marca en cerca de una década.
Maike Metals importa cobre refinado para abastecer fábricas y obras de construcción en el mayor consumidor de metal rojo en el mundo.
Algunos grandes bancos, como Goldman Sachs Group y Bank of America Corp., han dicho que es posible que el cobre registre un alza aún más sorprendente a US$ 10,000 por tonelada, y que China podría repetir el superciclo de las materias primas de los primeros años de este siglo.
“Ha habido una relajación cuantitativa masiva en Europa y Estados Unidos, y la pandemia ha desencadenado un nuevo punto de crecimiento. Las oportunidades siempre siguen a las crisis”, señaló He. “El cobre está entrando en un mercado súper alcista durante los próximos tres a cinco años”.
Los catalizadores de la fortaleza del metal incluyen la depreciación del dólar, el gasto en infraestructura en EE.UU., la recuperación de Europa de la pandemia y la transición de China a nuevas fuentes de energía con alto consumo de cobre, afirmó He.
Crecimiento de la demanda
La economía de China, que ha liderado el repunte global tras los efectos de la pandemia, podría crecer entre 7.8% y 8% este año, señaló He, en línea con otras proyecciones.
Eso debería traducirse en que el crecimiento de la demanda de cobre refinado de China se mantenga por encima de 3% en el 2021, después de un aumento de 3.4% el año pasado a 13.4 millones de toneladas, dijo, y agregó que las importaciones de Maike Metals podrían aumentar en 300,000 toneladas en el 2021 a alrededor de 1.7 millones de toneladas.
Su optimismo también supone que se contenga la reciente reaparición del coronavirus en China. De hecho, algunos fabricantes podrían cancelar el próximo festivo del Año Nuevo Lunar mientras el país restringe los viajes, y eso podría aumentar la demanda de cobre durante un habitual período de calma estacional, dijo.
Señaló que también espera que las fricciones comerciales con EE.UU. bajo el nuevo presidente, Joe Biden, disminuyan, aun cuando persistan las frías relaciones entre las dos economías más grandes del mundo.