Las mineras en Chile, mayor productor mundial de cobre, están animadas por el repunte a máximos de una década que alcanzó esta semana el precio del metal, pero estiman que la tendencia también calentará sus negociaciones contractuales y presionará los costos.
El cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres superó los US$ 9,000 la tonelada por primera vez desde el 2011, con analistas optimistas de que la demanda de las industrias de energía y construcción abrumará la oferta.
“No lo llamaría ‘superciclo’ pero sí hay expectativas que tengamos unos tres años de buenos precios”, dijo Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), que agrupa al sector.
La estatal Codelco, mayor productora de cobre del mundo, ve el repunte como una “buena oportunidad” para generar caja para inversiones, pero advirtió que podría envalentonar a los proveedores de bienes y servicios, elevando costos.
Los altos precios podrían dar una ventaja a poderosos sindicatos ante las próximas negociaciones. Spence y Escondida -el mayor yacimiento mundial- de BHP, tienen previstas discusiones este año.
Los Pelambres de Antofagasta y la mina insignia de Codelco El Teniente también enfrentan próximas conversaciones.
“Si la negociación se pone compleja, esto podría llevar a posibles paralizaciones, golpeando más la oferta de cobre”, dijo Alejandra Wood, directora ejecutiva del Centro de Estudios del Cobre (Cesco) con sede en Santiago.
Agregó que el repunte del metal será tomado con tranquilidad por las empresas, aunque puedan acelerar algunos planes “más bien marginales”.
“El desafío que podrían enfrentar es caer en la trampa de pensar que este escenario será algo a largo plazo, y abandonar la disciplina de mantener los costos bajos para aumentar a toda costa la producción”, acotó.
¿Superciclo?
El repunte de los precios ha llevado a gigantes como JP Morgan y Goldman Sachs a vaticinar un “superciclo” de materias primas similar al observado a principios de la década del 2000 tras un enorme impulso de la demanda por la industrialización en las naciones emergentes, con China a la cabeza.
El ministro de Energía y Minería de Chile, Juan Carlos Jobet, dijo que la mayoría de los grandes proyectos mineros observan pronósticos de precios a largo plazo, pero dijo que la reciente alza puede hacer que algunas iniciativas sean más atractivas para los inversionistas.
“Si esta tendencia se mantiene, es posible que veamos el interés de acelerar o bien ejecutar proyectos de inversión”, dijo al destacar además que el auge también representa mayores recursos para el fisco.
Los galopantes precios son un alivio para las arcas de Chile, ya que el país busca recuperarse del impacto de la pandemia de coronavirus mientras avanza en una costosa campaña de vacunación, que es la más rápida de la región hasta el momento.
El país sudamericano recibe 60 millones de dólares extra en impuestos y regalías por cada centavo que sube el precio del cobre, según cálculos oficiales.
La estatal Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) pronosticó en enero que el metal promediaría US$ 3.30 por libra en el 2021 y dijo que el reciente salto “no implica hacer ajustes extraordinarios” a su pronóstico.
Sin embargo, Banchile-Citi dijo en un reporte reciente que elevó su proyección a US$ 4 por libra este año y el próximo, desde los US$ 3.4 y US$ 3.6 previos, respectivamente.
Precios volátiles
Felipe Román, presidente de la Federación Chilena de Minería (FMC), que agrupa a grandes sindicatos del sector privado, dijo que el aumento de los precios debería, no obstante, proporcionar holgura a las mineras para satisfacer las necesidades de los trabajadores que aún se recuperan de la pandemia.
Pero advirtió que todavía era “arriesgado” hablar de un superciclo que podría atraer a compañías a emprender proyectos insostenibles.
Hernández, de Sonami, dijo que el momento del aumento de precios es un recordatorio útil de la importancia de la minería a medida que Chile avanza en la redacción de una nueva Constitución, un proceso que las grandes empresas mineras multinacionales están siguiendo de cerca.
“Para nosotros como industria minera chilena enfrentándose al tema constitucional creo que es un argumento fuerte para que las fuerzas políticas estén dispuestas a seguir apoyando a la minería y que tenga una seguridad jurídica adecuada”, apuntó.
El ministro de Economía de Chile, Rodrigo Cerda, dijo a periodistas esta semana que el país debería, sin embargo, permanecer cauteloso, ya que las cosas podrían cambiar.
“Hay que ser prudentes. Sabemos que los commodities en general, y el precio del cobre es uno de ellos, tienen volatilidad”, recalcó.