Los inversionistas no son los únicos cada vez más optimistas sobre el cobre.
La confluencia de factores que convierten a los productores en máquinas de dinero también está alentando a los trabajadores en Chile, lo que aumenta el riesgo de huelgas en un período agitado de conversaciones salariales para la mayor nación minera de cobre.
Una combinación inusual de aumento de precios y débiles monedas locales está aumentando los márgenes de la industria, que también se ven beneficiados por las ganancias de productividad durante la pandemia de coronavirus. Los jefes sindicales se están dando cuenta.
“La minería en Chile es más rentable ahora que durante mucho tiempo, incluso durante el auge”, dijo en una entrevista telefónica Luis Redlich, presidente de uno de los principales sindicatos de la mina Centinela de Antofagasta Plc. “En estas condiciones, no hay excusa para que los trabajadores no obtengan lo que merecen”.
Los miembros del sindicato de Redlich rechazaron la oferta salarial final de la compañía el lunes, lo que significa que abandonarán el trabajo a menos que las dos partes puedan resolver sus diferencias en conversaciones mediadas. La semana pasada, Lundin Mining Corp. acordó pagar un bono de firma de US$ 23,000 a cada trabajador para poner fin a una huelga de uno de los sindicatos en su mina Candelaria.
Centinela y Candelaria son parte de una serie de negociaciones laborales en un país que representa más de una cuarta parte del cobre extraído del mundo. El próximo año, 31 contratos expiran en Chile, según BTG Pactual, incluida la enorme mina Escondida de BHP Group, afectada por una huelga de 44 días en el 2017.
El cobre ha subido al precio más alto en siete años en medio de la impresionante recuperación económica de China, y las débiles monedas locales magnifican el impacto para los productores.
Los sindicatos también señalan los sacrificios que sus miembros están haciendo en la pandemia. Chile está produciendo a niveles similares al año pasado con menos trabajadores, gracias en parte a los cambios en los turnos y las rotaciones.
En una presentación el martes, la agencia de cobre del gobierno chileno, Cochilco, dijo que la productividad laboral minera aumentó 25% en el tercer trimestre y 28% en el segundo trimestre.
Las empresas estarán ansiosas por evitar paros en una etapa del ciclo de alto precio y alto margen y estarán en una posición más sólida para satisfacer las demandas sindicales.
Los productores aún están enfocados en mantener los costos operativos bajo control, dado lo costoso que es desarrollar nuevas minas a la luz de normas ambientales más estrictas, asegura el analista de productos básicos de BTG Pactual César Pérez-Novoa.