El director ejecutivo de la Agencia Internacional de Energía (AIE) consideró como decepcionantes las decisiones de los integrantes de la OPEP+, y aseguró que cuenta con ‘stock’ suficiente como para seguir operando en los mercados petroleros, en que los precios están por las nubes.
Los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+) persistieron este miércoles en su enfoque de abrir el grifo con cuentagotas, a pesar de haberse disparado los precios como consecuencia de la guerra en Ucrania, lo que plantea temores por el suministro.
El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, describió estas decisiones con una sola palabra: “decepcionantes”.
Pero, “contamos con reservas más que suficientes para intervenir si así se justifica”, añadió.
La AIE había anunciado el martes que los países miembros liberarán 60 millones de barriles de crudo de sus reservas de emergencia para estabilizar el mercado tras la invasión de Rusia a Ucrania.
“Estos 60 millones de barriles apenas representan el 4% de nuestro stock”, subrayó Birol, insistiendo en que la medida anunciada el martes era sólo “inicial”.
En el contexto de guerra en Ucrania, estas medidas adoptadas por la AIE no han sido suficientes como para mitigar el despegue de los precios del petróleo.
Este jueves, aumentaron aún más, con el barril del crudo West Texas Intermediate (WTI) estadounidense superando los US$ 115, cifra tope desde el 2008, y el Brent del mar del Norte acercándose a los US$ 120.
La AIE, con sede en París, fue fundada en 1974 para garantizar el suministro a los países desarrollados tras la crisis petrolera, una misión que desde entonces ha sido ampliada.
Cuenta con 31 miembros, entre ellos Estados Unidos, Japón y varios países europeos (Alemania, España, Francia, Italia, Reino Unido, entre otros).
Cada miembro debe mantener reservas de emergencia de crudo para cubrir el equivalente a las importaciones durante 90 días. En caso de plantearse problemas de abastecimiento pueden decidir liberar sus existencias en el mercado en el contexto de una intervención coordinada.
Los países de la organización disponen de un ‘stock’ de 1,500 millones de barriles de crudo.