La motivación del equipo influye de forma considerable en su desempeño. (Foto: iStock).
La motivación del equipo influye de forma considerable en su desempeño. (Foto: iStock).

El desempeño laboral de cada trabajador influye de forma cuantitativa y cualitativamente en una organización. Si bien depende en gran medida de las acciones de los empleados, la empresa puede hacer mucho para elevar este rendimiento.

Por ello, Sebastián Ausin, country manager de BUK Perú, empresa de tecnología para la automatización de la gestión de recursos humanos, brindó cinco estrategias para mejorar el desempeño de los trabajadores.

1.- Motivación: mantener a los colaboradores motivados genera un mayor compromiso con la empresa, resalta las ganas de trabajar y conseguir objetivos, además, de aumentar el compañerismo y comunicación.

¿Cómo motivarlos? Cn diferentes iniciativas como un aumento de salario, compensaciones por desempeño y capacitaciones. No importa cuál de ellas se elija, siempre generarán un sentido de pertenencia.

2.- Capacitar y educar a los colaboradores:

Una herramienta muy importante a la hora de querer mejorar el desempeño laboral de los colaboradores es entregarles los instrumentos necesarios para que puedan mejorar sus habilidades y conocimientos en el tema que sea necesario.

De esta manera, se harán más expertos, podrán mejorar su desempeño y lograr sus objetivos de una mejor manera.

No solo ayudará en el crecimiento del negocio, sino que los hará crecer de manera profesional, dando espacios a que se puedan desarrollar profesionalmente y a tener colaboradores más especializados y capacitados para manejar las temáticas.

3.- Objetivos y desafíos realistas:

Al evaluar las habilidades o competencias de los colaboradores, también, se está evaluando si lograron alcanzar los objetivos o las metas propuestas por el equipo.

Intentar crear objetivos a corto y largo plazo con el fin de que el colaborador pueda ir alcanzando metas y así, motivándose a alcanzar las que le falten. Romper la monotonía con objetivos realistas, metas alcanzables y tareas que se transformen en desafíos para el día a día.

4.- Administración del tiempo:

Uno de los recursos que más afecta la productividad es el tiempo. Según un estudio realizado por la firma norteamericana At Task, los colaboradores solo dedican un 45% de su tiempo al día en realizar su trabajo.

¿Qué se produce en el resto del día? Algunas medidas implementadas por las empresas han sido limitar la cantidad de reuniones a solo aquellas que sean realmente necesarias, evitar distracciones e intentar acortar los “breaks”.

5.- Entregar retroalimentación continua:

El feedback o retroalimentación no solo debe considerarse como una instancia de comunicación después de que se realiza una evaluación de desempeño, sino que debería existir constantemente.

El tener una comunicación fluida entre el equipo y una relación más abierta y confiable entre el líder y el colaborador permite que se puedan ordenar mejor las tareas diarias.

El feedback no solo ayuda a mejorar como persona, sino que permite guiar a los colaboradores para que enfoquen sus habilidades en las metas del equipo.