Bill Gates es un empresario de éxito, fundador de Microsoft y filántropo incansable, siempre dentro del top 10 de los hombres más rico del mundo, con una fortuna valorada en unos US$ 134.000 millones, según publicó la revista Forbes. Pese a las altas y bajas, es uno de los millonarios que mantiene una posición económica estable desde hace más de 20 años.
Fundó Microsoft en 1975, renunció al cargo de director ejecutivo de la empresa en el año 2000 y cortó todo cargo a tiempo completo con la empresa en 2008 para centrarse en su fundación, pero aún así sigue acumulando millones.
A lo largo de su carrera, Gates ha dejado algunos consejos que develan cómo consiguió el éxito, los cuales puedes ser bien aprovechados por otras personas que quieren replicar su ascendente carrera.
-Invertir-
En distintas publicaciones se aprecia que Gates no tiene el dinero “durmiendo” y lo invierte de distintas formas, ya sea en la bolsa, empresas en crecimiento y consolidadas o en la compra de terrenos.
En distintas charlas ha comentado que cuando quiere iniciar un negocio analiza los riesgos y beneficios, además, escucha a expertos que puedan ayudarle a tomar la decisión correcta.
Según el portal especializado InfoTechnology, Bill Gates invierte en tres empresas clave que siempre le generan ingresos importantes: Caterpillar (sector de la maquinaria pesada), UPS (la cadena de logística y entrega de paquetería) y REIT Crown Castle International (una de las firmas de antenas de celulares más poderosas del mundo).
-Personas valiosas-
“Gates siempre insiste en la oportunidad de rodearse de gente ‘valiosa’ de la que se pueda aprender y que lo inspiren”, escribe el portal Uppers.
“Cuando tienes a personas inteligentes trabajando contigo, quieres mantenerlas estimuladas”, ha dicho Gates, dejando en claro la importancia de juntarse con gente que sume e influya al éxito.
Prueba de estas declaraciones es la fundación “Bill y Melinda Gates” que emprendió con su entonces esposa por más de dos décadas en su afán de luchar contra las desigualdades y enfermedades en los países pobres del mundo.
En su libro “The Moment of Lift” (2019) Melinda relata que en 2012 peleó amargamente con su esposo para ver quién redactaría la “carta anual” de la fundación, que Bill escribía desde 2007.
“Pensé que nos mataríamos el uno al otro”, dijo. Desde 2014 la escriben de manera conjunta.
Sin embargo, luego del divorcio no queda claro si continuarán trabajando juntos en la fundación.
-Hobbies-
Pese a que uno esté volcado al éxito, Gates considera que no debe desatender los hobbies o pasatiempos individuales con los que disfruta porque es la mejor terapia para desconectar, ‘resetear” el cerebro y regresar al trabajo renovado.
Es sabido que el hobbie predilecto de Gates es la lectura, pero el fundador de Microsoft también se distrae con series, tal como lo relató en una entrevista, donde confesó que se enganchó con Lupin, la producción de Netflix.
Lo siguiente que supe es que habían pasado cuatro horas. Realmente me dejé ir esa noche, y me estaba riendo de mí mismo. No suelo hacer eso, pero te lo hacen fácil. Te sientas ahí y el siguiente episodio está listo y funcionando”, admitió Gates a Clubhouse, según reseña El Universal.
También confesó que disfrutó las series The Americans y Modern Family. No juega videojuegos, pero se distrae viendo a sus sobrinos jugarlos.
Sí juega al bridge (juego de cartas), además del tenis y el pickleball, dijo en la entrevista.
-Filantropía y pandemia-
Gates tiene fama de visionario, desde el inicio de su vida académica. Ingresar en 1973 para estudiar derecho en Harvard y renunciar dos años después para fundar Microsoft es sin duda una de las apuestas más arriesgadas que se conocen. De igual forma se entiende la decisión por emprender una fundación de ayuda mundial y dejar de lado el manejo de su empresa.
Desde el año 2000, ha invertido casi 55.000 millones de dólares en 135 países para intentar lograr sus objetivos. Cada año dona unos 5.000 millones de dólares a diferentes causas, según el New York Times.
La lucha contra el coronavirus también es una prioridad: desde febrero de 2020 la fundación ha gastado más de 1.750 millones de dólares en el combate el COVID-19, según informó la organización al diario The Washington Post.
Pese a la abundancia económica de la que goza Bill Gates siempre buscó una forma de que los que más necesitan mejoren sus condiciones de vida y esa quizá es la mejor lección de éxito para las personas que están buscándolo.