Con las clases presenciales reactivadas, las universidades también están apostando por reactivar sus proyectos. Es el caso de la Universidad Antonio Ruíz de Montoya, la cual ha sumado nueva infraestructura en su campus de Pueblo Libre, y ve nuevos proyectos.
“Hemos sumado un nuevo pabellón y estamos viendo sumar otro; una ventaja de que todos los alumnos no vayan a la presencialidad es que podemos usar espacios comunes como el área de cafetería para hacer crecer la infraestructura”, señala el padre Rafael Fernández Hart, rector de la universidad.
Esta nueva construcción implica un nuevo edificio de cinco niveles, con aulas, cafetería y un campo deportivo en el último piso.
Y en medio del proceso de retorno progresivo a las clases presenciales, están considerando la inversión en mantener la virtualidad, considerando que su modelo de enseñanza apuesta por las aulas híbridas.
“Estimamos que un 15% de los cursos que dictamos se den de manera híbrida, al menos en este primer semestre, e iremos incrementado poco a poco, pero de acuerdo a como vaya evolucionando la situación de la pandemia”, afirmó.
Según indicó el rector, eso no implica que habrá una alternancia de grupos de alumnos que puedan asistir a clases, además de usar un criterio especial para ver qué cursos pueden darse en modalidad híbrida. “Hemos decidido que los recién ingresantes son los deben asistir más, ya que deben relacionarse e identificarse con una institución, y buscamos asegurar que la materias más complejas también se den en modalidad híbrida”, comentó.
Planes
Pero entre los planes de la Universidad Antonio Ruíz de Montoya también les interesa ir a nuevas zonas de Lima. “Tuvimos un estudio de mercado que nos llevó a concluir en quedarnos en Pueblo Libre, sin embargo, no hemos cesado en la idea de abrir nuevas sedes, que deben ser licenciadas por Sunedu, y puede ser considerado oneroso, pero es un paso que debemos dar con certeza. Nuestro modelo universitario flexible no busca llegar a 50 mil estudiantes sino que sea personalizado, esperamos llegara 5 mil o 6 mil alumnos”, comentó.
Lo que sí harán es dictar cursos de formación continua (no conducentes a grados) para lo cual no se requiere un permiso a Sunedu, sin licenciar el local, haciéndolo fuera de Pueblo Libre, lo cual estiman concretar este año, posiblemente en el segundo semestre.
Ven nuevos espacios
La virtualidad les permitiría llegar también a otras ciudades del país. Sin embargo, el rector refiere que ahí surge un debate ante Sunedu. “Si la carrera se licenció de manera presencial así debe darse, aunque se dio una excepción para que por pandemia sea por manera virtual”, indicó.
Así, aunque el proceso no es corto, van a hacer el estudio para empezar a licenciar algunas carreras, maestrías y diplomados – las más importantes – que puedan lograrse de manera virtual.
Según indicó, junto con otras universidades se ha buscado que la manera híbrida continúe, a manera de llevar la educación hacia otras zonas, pero todavía no hay un pronunciamiento de Sunedu. “Esperamos que se pronuncien sobre la modalidad híbrida”, comentó.
Otrosí digo
Carreras. Sobre carreras nuevas, el padre Rafael Fernández Hart indicó que hay carreras que ya están licenciadas pero no las han puesto en el plan de estudio. “Vamos a ver con una consultora de investigación de mercado qué conviene más si abrir la carrera licenciadas o pensar en otras nuevas”, indicó.
Lo que sí tienen terminado son nuevas maestrías, pero quieren ver en base a ese estudio si las licencian.