El sindicato de pilotos de Southwest Airlines Co. ha demandado a Boeing Co., bajo el argumento de que el fabricante apresuró la producción del avión 737 Max para mantenerse competitivo, por lo que retuvo información clave sobre una característica que contribuyó a dos accidentes fatales en cinco meses.
“Boeing tomó la decisión calculada de apresurar un avión reacondicionado al mercado para asegurar su cuota de mercado de pasillo único y priorizar sus resultados”, señala la demanda de la Asociación de Pilotos de Southwest Airlines. El sindicato dijo que está buscando al menos US$ 115 millones por daños sufridos hasta el final de este año, principalmente por pérdida de salarios y gastos legales.
“Boeing abandonó las prácticas sólidas de diseño e ingeniería, retuvo información crítica de seguridad a los reguladores y engañó deliberadamente a sus clientes, los pilotos y el público sobre el verdadero alcance de los cambios de diseño”, señala la demanda.
La demanda y las críticas públicas de los pilotos de Southwest socavan el esfuerzo de Boeing por reconstruir la confianza en su avión más vendido después de meses de mala publicidad.
Southwest es el operador más grande del Max, que ha estado en tierra en todo el mundo desde marzo. Mantener sus 34 aviones Max en tierra y la imposibilidad de obtener nuevos pedidos ha reducido al menos US$ 225 millones de los ingresos operativos de la aerolínea y ha causado decenas de miles de cancelaciones de vuelos. El avión ha sido retirado de los itinerarios de Southwest hasta el 5 de enero.
Los choques del Max en vuelos de Lion Air y Ethiopian Airlines han provocado investigaciones más allá de los accidentes, tanto sobre el proceso de diseño de Boeing para la aeronave –una versión actualizada de su caballo de batalla 737–, como sobre si las revisiones de seguridad y la certificación por parte de los reguladores estadounidenses se vieron comprometidas. Boeing estaba tratando de mantenerse competitivo con el Airbus SE A320neo, que puede volar más lejos y gasta menos combustible.
La demanda fue presentada el lunes en un tribunal estatal en Dallas, según el sindicato. La presentación no pudo ser confirmada de inmediato en la corte.
Investigación penal
La denuncia cita informes de noticias, declaraciones hechas por funcionarios y otras fuentes para respaldar sus acusaciones. Sin embargo, aparte de una recomendación de la junta de seguridad, ninguna de las revisiones e investigaciones oficiales sobre cómo se diseñó y aprobó el Max para volar ha emitido hallazgos públicos.
Boeing ha dicho que no hubo una falla en el diseño, las pruebas y la aprobación de la Administración Federal de Aviación del Max.
Tanto el accidente de Lion Air el 29 de octubre como el de Ethiopian Airlines el 10 de marzo se produjeron por un mal funcionamiento que activó una nueva característica, el Sistema de aumento de las características de maniobra (MCAS, por sus siglas en inglés), el cual empujó repetidamente los aviones en picada. En los accidentes murió un total de 346 personas.
Las aerolíneas y los pilotos no fueron informados de la existencia del MCAS, que se había instalado para contrarrestar los efectos de los motores más grandes del Max en la estructura del 737.
Exigencias de entrenamiento
Boeing también restó importancia a los cambios de diseño en el Max para convencer a los reguladores y las aerolíneas de que no se necesitaba una capacitación que requiriera mucho tiempo, ya que el avión era una actualización del modelo anterior, el 737 Next Generation, según la demanda.
“Si la aerolínea hubiera estado al tanto del MCAS y del verdadero alcance de las diferencias entre el 737 NG y el 737 Max, nunca habría aceptado pilotear el 737 Max”, asegura el sindicato, que representa a casi 10,000 pilotos de Southwest.
El sindicato decidió demandar a Boeing después de no llegar a un acuerdo en las conversaciones que comenzaron a fines de agosto, afirma Jon Weaks, capitán de Southwest y presidente del grupo laboral.
Boeing ha modernizado el Max para evitar que ocurra el mismo mal funcionamiento y está refinando el software de control de vuelo del avión. El fabricante espera que la puesta en tierra sea levantada durante el cuarto trimestre.
Southwest ha dicho que tomaría aproximadamente 45 días después de que se levante la prohibición para tener el Max listo para volar.
La semana pasada, el Comité de Infraestructura y Transporte de la Cámara de Representantes le pidió a Boeing que pusiera a disposición un ingeniero de la compañía que presentó una queja de ética interna este año sobre la cultura de seguridad de Boeing. El panel está investigando la certificación del Max por parte de los reguladores de aviación estadounidenses.