De acuerdo al Banco Central de Reserva del Perú (BCR), en el Perú operan alrededor de 30 fintech de cambio de divisas. Este contexto ha permitido a la casa de cambio digital Noncash transaccionar más de US$ 600 millones desde su fundación en el 2019.
El fundador de Noncash, Omar Azañedo, reveló que espera culminar su tercera ronda de inversión por US$ 3 millones antes que culmine el año. “Con este capital queremos seguir fortaleciendo nuestra plataforma digital, así como desarrollar nuevas unidades negocios, como la de remesas o servicios multipagos“, detalló.
La fintech se ha propuesto crecer 80% al cierre del 2023, con una facturación cercana a los US$ 500 millones. Para lograrlo, ofrecerá nuevos servicios financieros y expandirá su sistema de franquicias. Para aumentar su base de clientes, apuntará al sector empresarial, cuyo ticket cambiario es más alto que el de los particulares.
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Mirada hacia el exterior
Noncash tiene planes de iniciar operaciones en el 2024 en Bolivia, Chile y México, tras encontrar similitudes entre los mercados de cambio de moneda de dichos países.
“No todos los países tienen características para desarrollar un mercado cambiario. En Perú, existen factores como la gran penetración de cambistas en la calle, diversas casas de cambio físicas, la facturación de empresas en dólares o compras significativas en dicha divisa”, anotó.
Luego de culminar con el desarrollo de su proyecto piloto de remesas, Noncash evalúa llegar a Estados Unidos, así como a España e Italia por la gran presencia de peruanos.
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Expansión de franquicias
En el 2021, la fintech peruana inició con un modelo de franquicias. Hoy, ya cuenta con nueve casas digitales en Lima y una en Arequipa. “La mitad de ellas ha facturado más de US$ 2 millones en menos de un año y esperamos tener un crecimiento de 50% al cierre del año”, comentó Azañedo.
El ejecutivo considera que hay oportunidades para llevar este modelo de negocio a más provincias, donde “el mercado cambiario digital no se ha desarrollado a un ritmo acelerado”.
De acuerdo con Azañedo, el franquiciado es un empresario que busca diversificar su negocio o un profesional senior que quiere emprender. “Ofrecemos la posibilidad de gestionar nuevas operaciones de compra y venta de dólares. Nosotros ponemos a disposición toda nuestra plataforma, aplicación, soporte y metodología”, explicó.