Las acciones de United Parcel Service Inc. (UPS) registraron la mayor caída en más de 15 años después de que el gigante de la mensajería informara una ganancia muy por debajo de las estimaciones de Wall Street en medio de la presión de la inflación salarial y la débil demanda del servicio.
UPS anunció el martes que en el segundo trimestre de 2024 ha tenido un beneficio neto de US$ 1,409 millones, un 32% menos a nivel interanual.
La ganancia ajustada del segundo trimestre fue de US$ 1.79 por acción, según informó UPS el martes en un comunicado. Los analistas habían previsto una ganancia promedio de US$ 1.98 por acción, según las estimaciones recopiladas por Bloomberg. Los ingresos también estuvieron por debajo de las expectativas.
Los resultados suponen un revés para UPS, que se enfrenta a mayores costos laborales en un entorno de demanda debilitada tras el auge de las entregas del comercio electrónico impulsado por una pandemia. Los inversionistas ya habían manifestado sus dudas sobre si la empresa podría alcanzar el objetivo de ventas a largo plazo anunciado en marzo.
“Creemos que este trimestre representa un nuevo retroceso en la percepción de los inversionistas hacia las acciones”, escribió Stephanie Moore, analista de Jefferies, en una nota de investigación.
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Las acciones de UPS cayeron más de un 11% tras la apertura de los mercados en Nueva York el martes, su mayor pérdida intradiaria desde octubre de 2008. Las acciones habían bajado un 7.7% este año hasta el cierre del lunes.
La empresa de mensajería ha tratado de reducir el gasto al tiempo que se centra en aumentar el margen operativo en los próximos años. UPS reveló en enero un plan para ahorrar US$ 1,000 millones recortando 12,000 empleos directivos. La compañía, con sede en Atlanta, ha dicho que los gastos laborales se anticiparían en el nuevo contrato del sindicato Teamsters, acordado hace aproximadamente un año.
El volumen promedio diario de paquetes en el segundo trimestre aumentó ligeramente a 20.93 millones, levemente por abajo de la estimación de los analistas de 20.96 millones.
Aunque la empresa había previsto un descenso de la ganancia operativa, el volumen creció por primera vez en nueve trimestres, lo que la directora ejecutiva, Carol Tomé, calificó de “punto de inflexión significativo para nuestra empresa”.
Contrato con USPS
Un nuevo contrato con US Postal Service podría suponer un impulso adicional en la segunda mitad del año. El tercer y cuarto trimestre también traen consigo picos de demanda de envíos —y recargos por demanda— en torno a la temporada navideña.
UPS redujo sus previsiones de ingresos para todo el año a US$ 93,000 millones, frente a una previsión anterior de hasta US$ 94,500 millones. La empresa también reinició un programa de recompra de acciones con un objetivo de unos US$ 1,000 millones anuales.
“Los resultados de hoy, más débiles de lo esperado, no dejarán a los inversionistas con una sensación de confianza en las perspectivas”, dijo Brandon Oglenski, analista de Barclays, en una nota de investigación.
Los resultados llegan un día después de que UPS anunciara la adquisición de la empresa mexicana de mensajería Estafeta. UPS ha señalado la expansión internacional, especialmente en el destino de nearshoring de México, como una de las principales prioridades de crecimiento para la empresa.
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Hablan los resultados
En un comunicado, UPS indicó que su facturación total solo descendió un 1% entre abril y junio, hasta los US$ 21,818 millones, pero los altos costes hicieron mella en sus beneficios operativos, sobre todo en su principal negocio, el de la mensajería en Estados Unidos.
El negocio de mensajería en Estados Unidos, con una facturación superior a 14,100 millones, tuvo un beneficio operativo de menos de 1,000 millones, lo que supone una caída del 38% respecto al mismo tramo de 2023.
El negocio de mensajería internacional ingresó casi 4,300 millones y tuvo un beneficio operativo de unos 700 millones, un 19 % menos.
Los resultados trimestrales incluyen un cargo de 120 millones, principalmente debido a la “resolución de un asunto regulatorio internacional” y a costes de restructuración, que ha afectado a los beneficios.
La consejera delegada de UPS, Carol Tomé, reconoció las flojas cifras pero aseguró que son un “punto de inflexión”, puesto que ha habido “un retorno al crecimiento del volumen en Estados Unidos por primera vez en nueve trimestres”.
“Como se esperaba, nuestro beneficio operativo ha caído en la primera mitad de 2024 respecto a lo que reportamos el año pasado. Más adelante esperamos volver al crecimiento del beneficio operativo”, dijo.
Según los analistas, la mala marcha de UPS se produce en un contexto de baja demanda en el transporte de mercancías por carretera a nivel global y de bajada de precios en el sector de mensajería.
UPS recientemente se ha hecho con un contrato para los envíos de paquetes por vía aérea del Servicio Postal de Estados Unidos, que antes era de su rival FedEx, y ha anunciado la venta de su negocio de logística basado en camiones, Coyote Logistics, y la compra de la firma de reparto rápido mexicana Estafeta, indica CNBC.
Los resultados, publicados antes de la apertura de Wall Street, tuvieron una mala acogida por parte de los inversores y las acciones de UPS caían más del 10 % en las operaciones del mercado secundario.
Con información de Bloomberg y EFE
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