El último domingo, tras más de dos años, la frontera terrestre de Perú con Chile se reabrió y, con ello la posibilidad de que la ciudad de Tacna recupere su movimiento comercial como consecuencia del consumo chileno.
Así, ante cambios en los hábitos de compra y en un nuevo contexto económico mundial, las expectativas de los empresarios tacneños se inclinan a recuperar el volumen de ventas que tenían en los sectores de bienes y servicios; pero también observan potencial de crecimiento en la comercialización de productos de primera necesidad.
Así lo señaló la presidenta de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de Tacna, Corinne Flores, quien indicó a Gestión que existe oportunidad en estos negocios, dado que el precio de los productos de la canasta básica familiar se ha incrementado en el vecino país, lo que podría anticipar una mayor compra en suelo peruano.
Al respecto, la representante gremial aclaró que si bien se trata de productos que no dejarán el margen de prepandemia, pues los precios en nuestro país también se han elevado, la rentabilidad puede mejorar dependiendo de los volúmenes de compra. “Anterior a la pandemia, los visitantes chilenos ya llevaban pan, azúcar, arroz, incluso papel higiénico; creemos que esta tendencia hoy continuará y puede crecer, toda vez que la oferta que tenemos es en bodegas, mercados y un supermercado”, mencionó.
Producción
Corinne Flores manifestó que adicionalmente a la oferta en víveres, también está la producción originaria de Tacna como son las aceitunas, orégano, aceite de oliva, naranjas, entre otros, cuyos productos, “por ser naturales de la región, ofrecen calidad y precios mucho más competitivos”; ello sostuvo, en un escenario en el que el empleo chileno también está afectado.
“En la prepandemia, el gasto promedio del chileno que llegaba a Tacna era de US$ 100, siendo encabezado, principalmente, por desembolsos en consultorios médicos, ropa, consumo en restaurantes; también servicios en imprentas. Hoy, esta jerarquización podría variar; todo depende de la demanda que muestre el consumidor, que finalmente también definirá la oferta de los negocios”, explicó la representante gremial.
Turismo y gastronomía
Previo al COVID-19, en un fin de semana, aproximadamente 25,000 chilenos llegaban a Tacna para realizar compras y hacer turismo. Este arribo dinamizaba la economía de hoteles y restaurantes, los cuales desde el domingo han vuelto a recibir a los vecinos del sur en sus instalaciones.
En esa línea, Corinne Flores no descartó que sean estos sectores los que muestren una recuperación más rápida ante el constante flujo chileno, como sucedió en años anteriores. Afirmó que de darse esto, el rubro turístico podría remontar ese 30% de recuperación alcanzado; a la vez, que se reactivarían aquellos negocios que estuvieron en stand by.
“El ingreso de los fines de semana a Tacna, como sucedía antes, era básicamente por recreación. Esperamos que esto se pueda dar en la forma que venía sucediendo, pues podemos observar un movimiento interesante desde la apertura que se dio el domingo”, añadió Flores, quien destacó que el turismo nacional no ha sido suficiente para la recuperación en Tacna.
Expectativa
Corinne Flores señaló que se espera que al cierre del año se haya logrado un ingreso de por lo menos medio millón de visitantes a través de los accesos fronterizos, teniendo en cuenta que en un año precovid este flujo llegó a alcanzar inclusive los 2 millones de visitantes.
“Por ahora todavía es un tanto incierta la situación, sobre todo, porque ambos países han sido golpeados, no solo por el COVID-19, sino también por la inflación y el menor empleo”, sostuvo la representante gremial.
“De este lado, tenemos la oferta, los precios más accesibles, así como también Zofratacna, pero debemos evaluar el poder adquisitivo y las nuevas tendencias de compra del consumidor chileno”, agregó.
PRECISIONES
- Meta. Con la llegada de los turistas chilenos, Tacna espera recuperar el 50% de su economía, adelantó la presidenta de la Cámara de Comercio de esa región.
- Pérdidas. En promedio, Tacna perdió US$ 300 millones por cada año cerrado de la frontera, según estimó la Cámara de Comercio de Tacna en diciembre pasado.
Fuga de empresas y talento
El presidente de la Asociación de Emprendedores del Perú (ASEP), Fernando Calmell del Solar, señaló que pequeñas empresas de manufactura, principalmente, de textil y calzado, así como profesionales de diversos sectores de Tacna, se han estado desplazando a ciudades como Arequipa, Moquegua e incluso Lima y Trujillo, en busca de nuevas oportunidades debido a las bajas ventas que tenían como consecuencia del cierre de la frontera con Chile.
Y es que tanto empresas de manufactura como emprendimientos dedicados al comercio, no tenían a los consumidores que venían de Chile.
Calmell del Solar afirmó que además de la migración de empresas, se ha observado la fuga de talento, pues profesionales que antes eran empleados en las empresas o que ofrecían servicios médicos, han tenido que salir a otras ciudades.
Estimó que, tras la apertura de la frontera, la recuperación en los negocios, se daría a partir del cuarto o quinto mes, teniendo en cuenta que, durante este tiempo, en Arica y en el norte del vecino país del sur se han generado diversos negocios.