Los créditos personales se aletargaron este año, pero el Banco Ripley apunta a desmarcarse de esa tendencia.
La clasificadora de riesgo Moody´s Local reafirmó la calificación crediticia del Banco Ripley Perú (B+), al dar cuenta de su posicionamiento en el segmento de créditos de consumo.
Estas operaciones de financiamiento se complementan con las sinergias existentes entre las empresas del Grupo Ripley (que opera en los sectores financiero, retail e inmobiliario), contando “con una de las tiendas por departamento más importantes del país y un canal relevante para las colocaciones del banco”, menciona.
Adicionalmente, considera que en la coyuntura actual resulta favorable para la clasificación del banco el aporte de capital de S/60 millones realizado por el accionista principal en julio último, que ha permitido a la entidad bancaria fortalecer su índice de capital global de 12.41% a 14.30%.
Principales retos
Ello le brinda espacio para retomar el crecimiento en las colocaciones de créditos, uno de los principales retos de Banco Ripley a la fecha, según la agencia calificadora.
Destaca la mejora lograda por el banco en cuanto a la diversificación de su fondeo en los últimos años, así como la participación creciente de cuentas de ahorro dentro del mix de depósitos, todo lo cual le ha permitido disminuir los costos de financiamiento con adecuados niveles de liquidez.
Pone de relieve la experiencia de la plana gerencial y del directorio del banco, así como su estrategia de transformación digital.
Así, valora que a través de la ampliación de los canales digitales, el banco ha logrado reducir la participación del canal de recaudación físico de 92% -previo a la pandemia- a 62%, que le ha permitido mejorar la cobranza en el contexto actual.
Sin embargo, Moody’s Local señala que limita que el banco pueda contar con una mejor clasificación el entorno operativo desafiante en el que se desenvuelve a causa de la crisis de la pandemia y la incertidumbre política.
Castigo
Tal contexto y normas recientemente aprobadas podrían retrasar la recuperación de los indicadores de calidad de cartera y rentabilidad del banco.
De hecho, refiere que el 25 de marzo puso sus clasificaciones bajo presión debido al aumento de la mora al cierre del 2020. Ante ello, durante el primer semestre del presente año Banco Ripley castigó cartera de créditos por S/291.9 millones, lo que le permitió reducir la morosidad, incluyendo la cartera con problemas, detalla.
Asimismo, destacó que el porcentaje de la cartera crediticia reprogramada descendió de 55.68% a 9.21% en el primer semestre, aunque tal nivel aún le genera un potencial riesgo de deterioro de cartera.
Empero, la mejora observada en los indicadores de morosidad fue contrarrestada parcialmente por la fuerte reducción de los créditos a junio del 2021 (-19.08% en el año) debido al menor dinamismo en nuevos desembolsos de créditos de consumo, que no logró compensar el gran volumen de castigos realizado.
Rentabilidad
En tal sentido, enfatiza que uno de los principales retos del banco es retomar el crecimiento de los créditos y continuar reduciendo la mora con el objetivo de mejorar sus indicadores de rentabilidad, así como seguir fortaleciendo su patrimonio, pues aún reportó pérdidas netas al primer semestre.
El banco viene enfocando sus esfuerzos en el otorgamiento de tarjetas de crédito a través de la captación de nuevos clientes, y en la colocación de préstamos Súper Efectivo dirigido a clientes con un mejor perfil de riesgo.
Sin embargo, y de acuerdo con las últimas proyecciones del banco, la mejora en los indicadores de calidad de cartera a niveles pre pandemia, así como la recuperación de la rentabilidad, tomaría más tiempo de lo inicialmente estimado, lo que podría dificultar el sostenimiento de las clasificaciones vigentes en la siguiente evaluación, indica Moody’s Local.