Airbus reportó pérdidas de 481 millones de euros (US$ 515 millones) en el primer trimestre del año, dio licencia a miles de trabajadores y solicitó préstamos multimillonarios para sobrevivir a la crisis del coronavirus.
Pero los problemas sin precedentes que enfrenta la industria de la aviación todavía están en una “fase inicial”, dijo su director general.
Incluso cuando las restricciones a los viajes motivadas por la pandemia se alivien, Guillaume Faury reconoció que tomará mucho tiempo convencer a los clientes para que vuelvan a volar. Cuánto es algo que no puede predecir.
Los ejecutivos de Airbus se mostraron esperanzados con que las entregas de aviones paralizadas por el virus puedan reanudarse en la segunda mitad del año. Pero se negaron a emitir lineamientos a largo plazo dado que el virus sigue propagándose, miles de aviones están en tierra en todo el mundo y los gobiernos son reacios a relajar las restricciones a viajar.
“Estamos en la crisis más grave que la industria aeroespacial ha visto nunca", dijo Faury. “Ahora necesitamos trabajar como industria para restaurar la confianza de los pasajeros en el transporte aéreo mientras aprendemos a coexistir con esta pandemia".
Después de advertir a los trabajadores de que el fabricante europeo de aviones está “desangrándose en efectivo”, Faury dijo que Airbus estudiará “cambiar el tamaño" de la empresa tras la crisis.
Por el momento, 3,000 empleados de Airbus en Francia están temporalmente el paro y se espera que esa cifra aumente. Además, 3,200 empleados en Gran Bretaña están en licencia y hay negociaciones en marcha para poner a miles de empleados en Alemania en planes de trabajo a corto plazo.
Airbus reportó un descenso del 15% en sus ingresos a 10,600 millones de euros en el primer trimestre del año.