La última señal de que Elon Musk se está inclinando hacia el gas natural llegó en forma de cuatro camiones cisterna al sitio de construcción de la megafábrica de automóviles eléctricos de Tesla Inc. en Austin, Texas.
Los camiones que pertenecen a Stabilis Energy, compañía de gas natural licuado con sede en Houston, estaban estacionados afuera de la planta, según imágenes aéreas publicadas el fin de semana en YouTube.
Juntos, los vehículos de 18 ruedas tienen la capacidad para transportar suficiente combustible fósil para abastecer de energía a 32,000 hogares estadounidenses durante un día.
El multimillonario fundador de Tesla, que durante mucho tiempo se ha burlado de la industria de los combustibles fósiles y ha promocionado la energía renovable como clave para evitar el desastre ambiental, depende cada vez más del gas para sus proyectos. Eso ya se había hecho evidente en el sitio de lanzamiento de SpaceX, también en Texas.
En enero, la primera señal de que el gas también se usaría en la planta de Austin, que fabricará el Cybertruck y otros vehículos eléctricos, fue el avistamiento de una enorme máquina de fundición a presión conocida como Giga Press. Construida por la italiana Idra Group, el equipo utiliza gas para fundir aluminio y otros metales para fabricar piezas de vehículos.
Tesla no respondió a las solicitudes de comentarios y Stabilis declinó hacer comentarios.
Stabilis posee y opera una planta en Eagle West Shale en George West, Texas, donde el gas se procesa en GNL que se puede cargar en camiones cisterna criogénicos y transportar cientos de kilómetros a sitios de construcción a ambos lados de la frontera entre México y Estados Unidos.
Además, un gasoducto de Atmos Energy, con sede en Dallas, recorre la propiedad de la megafábrica de Tesla. Atmos también declinó hacer comentarios.
No está claro cuánto gas necesitará la planta una vez terminada.