Junto con el boom de tendencias de alimentación saludable y crecimiento de compañías que ofrecen servicios de kits de comida fresca como Hello Fresh y Blue Apron, entre otras, el uso de ingredientes frescos y especias ha aumentado considerablemente en los últimos años.
Los consumidores están más involucrados en preparar y adquirir comidas sanas con ingredientes naturales que estén relacionados e involucren los temas de responsabilidad ecológica y social, afirmó la Oficina Comercial (Ocex) del Perú en Houston.
Uno de los ingredientes que aporta sabor y aroma de forma natural es el ajo, cuyo consumo anual, según estudios de Penn State University, se ha cuadruplicado en Estados Unidos desde el año 1980 y ahora equivale a aproximadamente 2 libras (0.90 Kg) per cápita.
Producción de EE.UU.
La producción doméstica se concentra en el estado de California, sin embargo, la gran demanda por este producto posiciona a Estados Unidos como uno de los mayores importadores en el mundo.
Uno de los principales atributos de este bulbo de orígenes asiáticos es la versatilidad y su sabor característico en el ámbito culinario. Es un elemento muy importante en la cocina, tanto europea, como italiana, mexicana, asiática y, por supuesto, en la peruana, aunque su uso se extiende a casi cualquier otro tipo de preparación y sazón culinaria.
Uno de los atractivos más importantes son sus propiedades nutricionales, siendo varios los estudios que afirman que su consumo constante ayuda a reducir los niveles de colesterol y sus propiedades protectoras del sistema cardiovascular ayudan a mejorar el estado de salud de personas que padecen de estos problemas.
El ajo es uno de los componentes esenciales de la conocida dieta mediterránea, la cual ha demostrado, a través de diversas investigaciones y hechos, ser una de las mejores en cuanto a aumentar la longevidad de quienes la siguen.
Los consumidores estadounidenses también valoran la gestión de responsabilidad social, ambiental y de comercio las empresas con este tipo de certificaciones.
Ajo orgánico
Como menciona Ken Christopher de Christopher Ranch –una de las compañías productoras de ajo más grandes de California– en una entrevista para The Packer (2018), el consumo de ajo orgánico se encuentra entre una de las tendencias más notables que ha tenido un crecimiento explosivo en los últimos años.
Se trata de una oportunidad a considerar, que podría impulsar el desarrollo de las exportaciones peruanas de este tipo de productos.
Los agricultores peruanos han sabido aprovechar el crecimiento de la demanda estadounidense, cuyas exportaciones fueron creciendo de manera notable en la última década.
Sin embargo, el gobierno estadounidense puso un obstáculo a las exportaciones de China en el 2018, quienes poseen el monopolio del mercado de importaciones, aumentando sus aranceles a 10%, seguido por un aumento a 25% en mayo del 2019.
Según Jim Provost de I Love Produce, este incremento ha producido un impacto en el precio del ajo chino, el cual consecuentemente es ahora más alto de lo habitual y equiparable con el ajo de California y el ajo importado de España.
Esta medida ha ayudado a promover la demanda de la producción nacional de ajo, reduciendo las exportaciones no sólo de China, sino de los demás países, entre los cuales se encuentra también Perú.
No obstante, debido a que la producción estadounidense de ajo no puede satisfacer la creciente demanda doméstica por sí sola, las importaciones son necesarias.
Compras de EE.UU.
En los últimos dos años, ha habido un incremento de las exportaciones de ajo a Estados Unidos, en el 2019 el ajo importado al país tuvo un valor total de más de US$ 186 millones, un crecimiento de 22.8% en comparación con el valor en el 2018, según la Oficina del Censo de Estados Unidos.
La participación de China, su principal proveedor, cayó de 68.3% en el 2018 a 59.4% el año pasado, en parte debido al efecto del aumento de los aranceles aplicados a este producto.
Con el incremento y amenaza de crecimiento de los aranceles a las importaciones chinas, la pregunta es qué países podrán llenar este vacío.
Para aquellos que no enfrentan el mismo aumento de aranceles, como Perú, en estos momentos existe una ventaja clave que vale la pena explorar y ser aprovechada.
Una ventaja que abre la puerta a la posibilidad para que las compañías peruanas puedan seguir expandiendo su oferta en el mercado estadounidense.