Los pequeños empresarios bodegueros en diversas regiones del Perú han tenido que cerrar s negocios debido a extorsiones e inseguridad. Andrés Choy, presidente de la Asociación de Bodegueros, detalló que el 2023 se reportó la clausura de 2,600 bodegas, de un total de 22,000 asociados, debido a la constante amenaza delictiva.
“Hasta el año pasado identificamos a 2,600 bodegas que cerraron (...) A nivel nacional existe 535 mil bodegas, pero no todas son socias nuestras y tampoco todas reportan”, indicó en entrevista a Canal N.
Detalló San Juan de Lurigancho es el distrito con mayor número de extorsiones; “y la zona más complicada es Lima Norte”.
“Este problema no solo afecta a los negocios sino también a las familiares de los bodegueros, quienes han sufrido violencia y amenazas, incluyendo demandas de pagos exorbitantes para no atentar contra sus vidas”, lamentó.
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Proponen que amenazas sean consideradas como delito
Choy instó a las autoridades ha actualizar las sanciones ante las nuevas modalidades delictivas que van surgiendo y que no están contemplados en la ley.
“No solo es un tema de la policía, sino también tiene que ver el Poder Judicial, la Fiscalía y los congresistas; porque tienen que ver las modificaciones legales. Muchas veces nosotros hemos ido con los equipos celulares con las amenazas para hacer una denuncia, pero como la amenaza no es un delito, la policía dice no puedo poner la denuncia porque es un delito y no es tipificado como delito; entonces, se tiene que ver un tema legal”, refirió.
Agregó que la Fiscalía y el Poder Judicial libera a los delincuentes; “los montos por procesos delictivos son pequeños y te dicen: solo es una falta; pero, este tema escala. Y ya hemos visto socios nuestros fallecidos, heridos o extorsionados”.