Consultora de Innovación y Estrategia Digital - BanBif
Muchos se preguntan cómo va a ir cambiando el panorama de servicios y productos financieros con la entrada de las Fintech y Neo Bancos al mercado. ¿Es esta una amenaza para las entidades tradicionales? ¿La banca tradicional desaparecería con la entrada de estos competidores?
Personalmente creo que no, todo lo contrario. La alianza entre Fintech y bancos es algo que tiene un gran potencial, justamente porque estos se complementan uno al otro. Por un lado, la banca tradicional no solo cuenta con un gran portafolio y expertise en productos bancarios, sino también con procesos regulados y aprobados por entidades como la SBS, lo cual facilita operar con una mayor cantidad de servicios y productos, y a una mayor escala en el país.
Por otro lado, las Fintech brindan modelos de negocio más innovadores y operan con una mayor agilidad, facilitando el aprendizaje y evolución de los servicios ofrecidos. Asimismo, cuentan con una infraestructura tecnológica más flexible, y un mejor diseño digital centrado en el usuario final. Este último punto es más importante de lo que parece, ya que las metodologías con las que trabajan las Fintech facilitan un mayor conocimiento y comprensión del usuario final, sus necesidades y cercanía, lo que permite diseñar productos y procesos más exitosos, así como estrategias que permiten su crecimiento exponencial.
En el caso de BanBif, se vienen trabajando alianzas con algunas Fintech y startups, sobre todo en lo que se refiere a financiamiento (préstamos) y las infraestructuras digitales que facilitan evolucionar nuestros procesos y servicios (como por ejemplo, el poder hacer una validación de identidad 100% digital, para que los nuevos clientes puedan abrir una cuenta de ahorros sin ir al banco).
La banca tradicional tiene mucho para aprender de las Fintech y Startups que están creciendo en el mercado peruano. Uno de estos aspectos es el diseño de modelos de negocio sostenibles. Muchos de estos modelos suponen la evolución de servicios o procesos que ya existían anteriormente, pero que no siempre han sido ofrecidos de la manera adecuada, o que muchas veces han sido dejados de lado porque se ha tenido un mayor foco en productos tradicionales. Estas nuevas empresas están consolidando su negocio en darle una vuelta y evolucionando estos productos o servicios, aprovechando su verdadero potencial.
De igual manera, la infraestructura tecnológica y el buen diseño digital con el que cuentan las Fintech permite brindar servicios 100% digitales, con una buena experiencia de usuario y sin fricciones. Esto no siempre es sencillo de realizar desde empresas que han construido sus procesos sobre otro tipo de tecnología, que no siempre es la más flexible para adaptarse a las tendencias y necesidades de los clientes. Diseñar, probar e iterar, enmarcados en una mayor agilidad para el despliegue y evolución de sus productos, son ventajas diferenciales en las Fintech que pueden ser aprovechadas por la banca tradicional.
La banca ha ido evolucionando en los últimos años, en parte gracias al ingreso de nuevos modelos de negocio en el mercado, pero también por la implementación de nuevas tecnologías y adaptación a tendencias globales. Entonces, ¿hacia dónde vamos? ¿Qué tendencias podemos encontrar en la banca internacional que aún no se han desarrollado en el país? Algunas que llaman la atención podrían ser el Open Banking, el uso de tecnologías como la Realidad Aumentada y el Blockchain, y la evolución de los espacios físicos bajo nuevos modelos inspirados en metodologías ágiles, como el Lean Bank Branch, así como la mayor apertura internacional reduciendo barreras para transaccionar entre y en otros países.
Sin embargo, creo que estas no serán necesariamente las tendencias que veamos en el futuro más inmediato. Debemos recordar que la innovación y evolución de servicios y productos estará siempre asociada al contexto y necesidad del mercado.
Es por ello que considero que algunos de los modelos que irán desarrollándose con mayor fuerza en nuestro país serán aquellos que brinden soluciones a mypes y pequeñas empresas, desde el lado B2B, como por ejemplo soluciones de medios de pago, facturación electrónica y otras orientadas al financiamiento.
Por el lado B2C, encontramos bastante acogida también a soluciones de financiamiento, de cambio de divisa y de inversión (en criptomonedas, bolsa u otros negocios), teniendo estas últimas bastante auge por el boom de las criptomonedas, así como la situación económica actual y de los últimos 2 años, que nos llevan a pensar en nuevas formas de hacer crecer nuestro dinero.
Las oportunidades que ofrecen las Fintech para desarrollar un verdadero mercado único digital de servicios financieros es grande, pero esto va a depender, por un lado, de que las regulaciones del país faciliten la colaboración entre Fintech, empresas y banca tradicional, velando por la seguridad de los clientes y sostenibilidad de los negocios, pero sin limitar el campo de acción de las Fintech.
Por otro lado, el aprovechar este potencial, dependerá de la apertura de empresas y banca tradicional para trabajar en colaboración, como ya se viene dando en otros países del mundo. Es a través de la formación de ecosistemas que se puede destapar el verdadero potencial de las Fintech y startups en general. Esta apertura no solo depende de una buena intención de las empresas, sino también de la flexibilidad de sus procesos y estructuras tecnológicas para poder integrarse a este tipo de servicios.
Creo que frente a este panorama, la pregunta que podemos hacernos hoy en día las empresas es, ¿estamos listos para dar este siguiente paso?