La ONU “no será parte” de ningún desplazamiento forzado de los palestinos que viven actualmente en Rafah, declaró el lunes el portavoz del secretario general, Antonio Guterres, al tiempo que afirmó no hay ningún lugar seguro en Gaza al que puedan ir.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha ordenado a su ejército que se prepare para una ofensiva en la ciudad meridional de Gaza, donde se refugian aproximadamente 1.4 millones de palestinos que huyen de los combates en otras zonas del territorio, según Naciones Unidas.
El conflicto entre Israel y Hamás se desencadenó tras el ataque del 7 de octubre del grupo militante palestino contra el sur de Israel, que causó la muerte de más de 1,160 personas, la mayoría civiles, según un recuento de AFP basado en cifras oficiales israelíes.
Netanyahu se comprometió a proporcionar un “paso seguro” para la salida de los civiles de Rafah, según declaró el fin de semana en una entrevista con ABC News, aunque sin especificar adónde iría el gran número de personas concentradas cerca de la frontera con Egipto.
Cuando se le preguntó si Naciones Unidas participaría en una misión de evacuación de este tipo, el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, declaró a periodistas que el organismo mundial quería “garantizar que cualquier cosa que ocurra se haga respetando plenamente el derecho internacional, respetando plenamente la protección de los civiles”.
“No seremos parte del desplazamiento forzado de personas”, dijo Dujarric. “Tal y como están las cosas, no hay en este momento ningún lugar seguro en Gaza”.
“No se puede enviar a la gente de vuelta a zonas que están plagadas de artefactos explosivos sin detonar, por no hablar de la falta de refugio”, agregó el portavoz, al referirse a partes del norte y el centro de la Franja de Gaza.
Reiteró que la ayuda humanitaria que entra en Gaza sigue siendo insuficiente, y advirtió que los suministros disponibles “pueden durarnos sólo días”.
La semana pasada, Dujarric ya había subrayado la necesidad de garantizar la “protección” de los palestinos concentrados en Rafah.
Israel ha llevado a cabo un bombardeo incesante y una ofensiva terrestre en Gaza desde el ataque del 7 de octubre.
El ministerio de Salud del territorio gobernado por Hamás afirma que la ofensiva ha matado al menos a 28,340 personas, en su mayoría mujeres y niños.