Los históricos beneficios obtenidos por el poderoso sindicato de Escondida en Chile, el mayor yacimiento mundial de cobre, alimentan las esperanzas de trabajadores de otras minas de poder obtener una mayor tajada del rentable negocio en momentos de altos precios del metal.
Expertos consultados por Reuters mencionaron que al buen desempeño en el valor del cobre se suma el intento de reconocimiento por mantener las operaciones durante la pandemia de coronavirus y el agitado clima político que vive el mayor productor mundial del mineral.
Los agremiados en Escondida lograron la semana pasada, luego de un tenso período de discusiones y a pocos días de ser habilitados para una huelga, bonos y beneficios finales del equivalente de unos US$ 30,000 por socio.
Los beneficios fueron mayores a los otorgados en marzo en la negociación de la mina Los Pelambres de Antofagasta, que entregó más de US$ 24,000 por trabajadores.
“Nuestro legítimo Bono de Reconocimiento, equivalente al 1% de los dividendos pagados a los dueños, a distribuirse en todos los trabajadores en partes iguales, ha sido recogido, más allá de los nombres dados para su pago”, señaló el sindicato de Escondida tras la firma del nuevo contrato.
El gremio había amenazado con estar preparado para una huelga incluso mayor a la de 44 días que protagonizó en el 2017 y que golpeó al yacimiento y al crecimiento económico del país.
El acuerdo es una referencia para otros procesos en la industria, que este año ha sido favorecida por las expectativas de recuperación económica mundial tras la pandemia.
Lo que viene
Durante este año quedan pendientes discusiones contractuales en El Teniente, Salvador y Ministro Hales de Codelco, Cerro Colorado de BHP, El Soldado de AngloAmerican, Sierra Gorda de KGHM.
El resultado “genera un efecto que ya estaba abierto por los mayores precios, que ya habían elevado expectativas y ahora con este acuerdo en Escondida -que es un récord- eso significa que hay un respaldo implícito a estas mayores demandas”, señaló Juan Carlos Guajardo, jefe de la consultora Plusmining.
El analista destacó, sin embargo, que ese acuerdo además cerró brechas pendientes de la negociación previa, tras la amarga paralización del 2017.
Los sindicatos ahora en huelga de la mina Andina de Codelco han citado el esfuerzo de los trabajadores durante la pandemia, que ha permitido que la industria sortee airosamente la crisis “y hoy hay que hacerles un reconocimiento”, aseguró Manuel Cañas, secretario del sindicato SUT de Andina.
“No pretendemos parecernos a Escondida, que es un gigante. Hoy día que la condición (de precios) es distinta, a lo menos debiéramos mantener los beneficios actuales no solo para los trabajadores vigentes sino para los que puedan llegar”, afirmó adurante una protesta el martes fuera del edificio corporativo de Codelco en Santiago.
A los dos gremios que paralizaron labores la semana pasada, se sumó el martes un tercer y más pequeño sindicato, lo que mantiene al yacimiento en operaciones mínimas.
Codelco ha dicho que lo ofrecido a los gremios “constituye el máximo esfuerzo de la compañía en el marco de su proceso de transformación”.
La estatal, mayor productora mundial de cobre, adelanta un multimillonario plan de inversiones que busca contrarrestar la caída en las leyes minerales de sus antiguos depósitos.
Guajardo señaló que es difícil manejar las expectativas comparando a la gigante Escondida con Andina, que ha tenido mucho problemas en el último tiempo y su desarrollo futuro ha sido cuestionado por su eventual impacto en glaciares.
Los trabajadores de la mina Caserones, de JX Nippon Mining, también han estado en huelga desde la semana pasada luego del fracaso de las discusiones de su nuevo contrato y no hay novedades por el momento sobre avances, señaló la empresa.
Para Alejandra Wood, directora ejecutiva del Centro de Estudios del Cobre (Cesco), el ambiente político en la nación -en medio de la redacción de una nueva Constitución y discusión de un proyecto de regalías- también contribuye a las demandas de los agremiados.
“Las condiciones de mercado y las condiciones políticas sin duda influyen en las expectativas de los trabajadores respecto de los montos de los bonos por cierre de negociación”, comentó.
“El precio del cobre está alto, y ronda la idea de que las ganancias deben ser compartidas”, agregó al recordar un proyecto de ley que busca ampliar la participación de los trabajadores en las utilidades de las empresas.
Un grupo de sindicatos de El Teniente, la mina estrella de Codelco, también ha rechazado las propuestas de la compañía en una negociación anticipada argumentando que faltan resolver temas “fundamentales y emblemáticos”.