Una fábrica en Bowling Green, Kentucky, Estados Unidos.
Una fábrica en Bowling Green, Kentucky, Estados Unidos.

Las empresas y los consumidores estadounidenses empezaron el año pensando que por fin bajarían las tasas de interés, por lo que hicieron grandes planes para comprar equipos o viviendas. Ahora todo eso está en pausa, lo que ralentizará amplios sectores de la economía en un futuro previsible.