El Fondo Monetario Internacional (FMI) aseguró hoy que China podría apuntalar el crecimiento de su economía a corto plazo con una “recalibración” de su estrategia de tolerancia cero contra el COVID, incluyendo un impulso a la campaña de vacunación para garantizar la protección ante el virus.
Tras culminar una ronda virtual de consultas con las autoridades chinas, el organismo elogió la “impresionante recuperación” de la economía del gigante asiático tras el impacto inicial de la pandemia, pero recordó que su crecimiento “se ha ralentizado y sigue bajo presión”.
Los principales factores que la institución cita para explicar la situación son los reiterados brotes de COVID que provoca la contagiosa variante ómicron desde principios de año, los “profundos desafíos” en el maltrecho sector inmobiliario y la ralentización de la demanda a nivel global, que podría afectar al sector exportador chino.
En concreto, la subdirectora gerente del FMI, Gita Gopinath, indicó que, pese a que la estrategia de ‘cero COVID’ se ha vuelto cada vez “más ágil”, las mutaciones más contagiosas del virus y las “continuas lagunas” en las campañas de vacunación -por ejemplo, entre los ancianos- se han traducido en confinamientos cada vez más frecuentes, lastrando así el consumo y la inversión privada.
La ‘número dos’ del organismo también se refirió a la crisis inmobiliaria en el gigante asiático tras la “bienintencionada” campaña de regulación con la que Pekín trató de “refrenar” los altos niveles de apalancamiento de numerosas promotoras del país, entre ellas algunas de gran relevancia como Evergrande.
Las medidas que tomó el Gobierno al respecto “han aumentado la presión financiera para las promotoras, provocando una rápida caída de las ventas residenciales y de la inversión, así como un acusado descenso de los ingresos de los gobiernos locales por venta de terrenos”, importante fuente de financiación para las administraciones municipales y regionales en el país.
El FMI reconoció las recientes políticas de apoyo al sector y pidió ir más lejos con “mecanismos fuertes y bien financiados” para garantizar que se terminen de construir las promociones con problemas económicos y proteger así a quienes compraron sobre plano.
“Estas medidas ayudarán a restablecer la confianza de los compradores y a facilitar una reestructuración de mercado”, indicó Gopinath, quien pidió llevar al mercado inmobiliario a un “tamaño más razonable” a medio plazo con reformas como la mejora del sistema de venta sobre plano o la ampliación de formas alternativas de ahorro.
¿Retirada del ‘cero COVID’ en 2023?
La subdirectora gerente indicó que, en 2023, la política fiscal china debería “proteger la recuperación y facilitar el restablecimiento del equilibrio”.
“Una posición de política fiscal neutra orientada a apoyar a los hogares ayudará a la hora de llevar a cabo un reajuste hacia el consumo y a impulsar el crecimiento de forma más efectiva”, explicó la economista, que apuntó que la política monetaria debería mantenerse flexible.
En su opinión, a medio plazo China debe “reactivar” las reformas estructurales que favorezcan al mercado, como garantizar la competencia justa entre las empresas estatales y las privadas.
Los pronósticos del FMI para China son de un crecimiento económico del 3.2% en el presente ejercicio y de un 4.4% en los dos próximos, siempre y cuando se cumplan las previsiones de que Pekín pondrá fin a su estrategia de ‘cero COVID’ de forma “gradual y segura” en la segunda mitad del 2023.
Sin embargo, Gopinath alertó de peligros a nivel internacional como la ralentización del crecimiento global, las subidas de tipos de interés o el encarecimiento de la energía, mientras que, a largo plazo, destacó los “riesgos de fragmentación” derivados de un posible “desacoplamiento” financiero de Occidente, así como de los límites al comercio, a la inversión extranjera y al intercambio de conocimiento en materia de tecnología.
Fuente: EFE